MADRID, 22 Nov. (EUROPA PRESS) -
El diputado de CiU en el Congreso Jordi Xuclà considera que el anuncio del presidente catalán, José Montilla, de que ésta será la última vez que se presente a las elecciones autonómicas huele "derrota", pero avisa de que, pese a renunciar a repetir como candidato, el líder del PSC no renunciará a dirigir su relevo en el seno del partido.
En un artículo publicado en su página personal de Internet, recogido por Europa Press, Xuclà pronostica que "el día después de las elecciones en el seno de la familia socialista puede estallar un proceso acelerado de relevo de la actual dirección".
Ante esa posibilidad, según su análisis, Montilla quiere que en su partido sepan que "su liderazgo no va para largo", seguramente "porque no puede ir", pero también que no "renunciará a dirigir el proceso de transición" en el PSE.
DEJAR HEREDERO Y TESTAMENTO
En opinión, de Xuclà eso, en la práctica, "quiere decir controlar las listas de las elecciones municipales del año que viene, controlar los pactos municipales postelectorales y dirigir el proceso de elección de un nuevo líder".
El diputado nacionalista apunta que en las últimas semanas se han sucedido reuniones de dirigentes socialistas "de mediana edad" han empezado a moverse para controlar el PSC tras los comicios. Se trata, según dice, de dirigentes "muy identificados con el PSOE, sin manías, y con un discurso de alejamiento y confrontación con el nacionalismo".
"Montilla quiere dejar heredero y testamento para que lo que consiguieron los 'capitanes' en el Congreso de Sitges de 1993 no tenga vuelta de hoja", añade, en referencia al cónclave de los socialistas catalanes que alzó a la cúpula a alcaldes como era entonces el propio Montilla.
ABANDONADAS LAS ÉLITES DE IZQUIERDAS
En opinión de Xuclà, "las dos almas del socialismo" que le mantuvieron "en la centralidad política durante 25 años dan paso a una mutación en profundidad" y a una "huida hacia delante no se sabe todavía hacia dónde".
Tras advertir de que al PSC les puede pasar como al Partido Socialista Francés (PSF) y caer en "bucle melancólico" por su crisis de identidad, agrega que es "curioso" ver cómo los catalanes "del mayo del 68 que adoraban Pasqual Maragall hoy desean el triunfo de Artur Mas ante el desprecio de un socialismo administrativista que ha abandonado la élite de izquierdas ilustrada".
