MADRID, 14 Jun. (EUROPA PRESS) -
El líder de Vox, Santiago Abascal, ve el caso de Tenerife de las niñas Anna y Olivia como la constatación de que "el mal existe". Y se ha negado a "entrar en una guerra de sexos" sobre las causas que provocan este tipo de crímenes.
Ante un crimen como el de Tomás Gimeno, Abascal ha defendido que se castigue "durísimamente" a los asesinos, "sean quienes sean y las víctimas quienes sean". Y ha recordado también el crimen de una madre contra su hija de cuatro años en Sant Joan Despí.
"No voy a caer en una guerra de sexos ni debate estéril, son hechos absolutamente lamentables", ha insistido rechazando que se diga a los ciudadanos que "el mal va a dejar de existir" y existen "varitas mágicas" para atajarlo.
"El mal va a existir siempre y lo queda a las sociedades es castigar a los malhechores y dejarlos encerrados para siempre en prisión", ha subrayado.