La Audiencia de Cantabria condena a entre tres y tres años y medio de cárcel a 7 procesados por sus declaraciones inculpatorias
SANTANDER, 14 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Cantabria ha absuelto a ocho de los 15 procesados de la 'Operación Vikingo', por tráfico de drogas, ante la anulación de diversas escuchas telefónicas que la Fiscalía introdujo como pruebas, debido a que el Auto judicial autorizándolas iba sin firmar. Entre los absueltos se encuentra Gabriel Ch.P., del 'clan de los charlines'.
Este defecto de forma ha motivado que todas las pruebas presentadas a raíz de dichas conversaciones, como diversos hallazgos de droga o de documentación en las viviendas de varios de los acusados, no hallan podido ser valoradas, pero sí las declaraciones inculpatorias de los propios acusados, la única prueba, para muchos de los siete condenados, que les va a llevar a prisión, víctimas de 'por la boca muere el pez'.
De los 15 procesados por formar una red de tráfico de drogas en Cantabria con mercancía proveniente de Galicia y Andalucía, han sido condenados a tres años y medio de cárcel y una multa de 50.200 euros, respectivamente, Iván T.P., Ricardo B.C., Andrés J.L., Iván T.A. y Manuel S.A.
Además, Jesús Manuel L.B., alias 'Chuchi', y uno de los principales cabecillas, deberá cumplir tres años de cárcel y una multa de 12.782 euros, mientras que su hermano Iván L.B. ha sido condenado al mismo tiempo de prisión y a una multa de 2.333 euros.
Las declaraciones de Iván T.P. fueron "claramente inculpatorias" tanto para él mismo como para "otros imputados", pues reconoció que "se dedicaba al tráfico de hachís, que tenía en su domicilio ocho kilos" de esta sustancia que "aún quedaba de una partida de 40 kilos que había adquirido en Cádiz".
"La autoinculpación y el reconocimiento de los hechos resulta claro e irrefutable", indican los magistrados, "con la descripción incluso de los viajes y los acompañantes, y ninguna circunstancia permite dudar de la veracidad de dicha declaración, en cuanto le perjudica".
Además, Iván T.P, el líder de la red del hachís, implicó en sus declaraciones a Manuel S.A., Ricardo B.C., y su primo Iván T.A. como sus compinches en la venta de droga al menudeo.
Por su parte, el gaditano Andrés L.J. reconoció "incluso en juicio, su labor de intermediación en la compra de hachís por parte de los anteriores".
Respecto a la vía que el fiscal había atribuido de tráfico de cocaína proveniente de Galicia, la Sala sólo condena a los hermanos Jesús Manuel L.B. e Iván L.B., idénticamente por sus declaraciones autoinculpatorias, absolviéndose a los otros procesados, incluido el 'charlín', de quien no se "ha declarado probado" que se dedicara "al tráfico".
Inicialmente, para los 15 procesados de la 'Operación Vikingo' -que supuso en enero de 2006 la detención de más de veinte personas y la incautación de más de 50 kilos de hachís, 30 gramos de cocaína y cerca de 55.000 euros- la Fiscalía solicitaba la pena de 65 años de prisión global y una multa total de 785.000 euros.
