Aceptan una pena de cuatro y dos años por intentar asesinar a dos hombres a los que debían dinero

Actualizado: martes, 6 febrero 2007 14:52

SEVILLA, 6 Feb. (EUROPA PRESS) -

Los acusados de intentar asesinar a dos hombres a los que debían dinero y a los que citaron con la excusa de que iban a devolvérselo, han aceptado hoy una pena de cuatro y dos años de prisión al reconocerse como autores de un delito de asesinato en grado de tentativa, por el que el fiscal solicitaba en un principio una condena de 14 y siete años.

Según explicaron a Europa Press fuentes de la defensa, previo a la celebración del juicio, previsto en la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Sevilla, se ha llegado a un acuerdo entre las partes, ya que los dos acusados se les ha aplicado la atenuante muy cualificada de reparación del daño, la haber abonado la indemnización a las víctimas.

No obstante, ninguno de los acusados ingresará en prisión, ya que el primero, E.N.P., por problemas psiquiátricos y por su adicción a las drogas se someterá "a una medida de seguridad con tratamiento ambulatorio", por el que deberá asistir a un centro sanitario regularmente, mientras que el otro acusado, J.A.B.A., al no contar con antecedentes penales tampoco tendrá que ir a la cárcel, explicaron las mismas fuentes.

Según consta en el escrito de acusación del fiscal, al que tuvo acceso Europa Press, los hechos sucedieron el 16 de diciembre de 2003, cuando el primer acusado, citó a las víctimas, J.P.B. y J.A.F.Q., en una venta de la carretera Marchena-Morón con la excusa de pagarles el dinero que les adeudaba. El otro acusado actuó de cómplice al guiar hasta la citada venta a las dos víctimas.

Tras indicarles un cambio de lugar, "más apartado de la circulación ordinaria", las víctimas se encontraron con E.N.P. con quien se enzarzaron en una discusión por la citada deuda "negándose el acusado a pagar la cantidad debida" y diciéndoles a los dos hombres "de aquí no vais a salir, os voy a matar".

Las víctimas se metieron entonces en el coche en el que se desplazaron hasta allí con la intención de marcharse, pero el procesado "tomó una escopeta de caza semiautomática, propiedad de su hermano, y de manera sorpresiva disparó a la rueda del vehículo para impedir que se marcharan", explica el informe de la acusación.

Posteriormente, E.N.P. efectuó otro disparo que impactó en la mano derecha de una de las víctimas, "alcanzando algunos proyectiles" al otro ocupante del vehículo. Como consecuencia de las heridas J.A.F.Q. sufre "una limitación importante en la movilidad de un dedo de la mano derecha", señala el escrito.