MADRID, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -
El acusado de colaborar con la célula responsable de los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid, Moutaz Almallah Dabbas dió su pésame a los familiares de las víctimas del 11-M y recordó a las víctimas del conflicto en Siria.
"Quiero dar el pésame a las víctimas del 11-M y a todos los inocentes y también me acuerdo de las víctimas que están cayendo ahora Siria", ha indicado Almallah en ejercicio de su derecho a la última palabra que ha aprovechado, además, para denunciar que un tío del presidente actual sirio, Rifad Assad, vive en España. "Espero que emprendan acciones contra este verdadero criminal", ha agregado.
El acusado ha precisado que ha optado por no prestar declaración en el juicio por consejo de su abogado aunque "sí puede hablar y defenderse". "He optado por respetar su opinión ya que él entiende más", ha asegurado.
La Fiscalía de la Audiencia Nacional ha elevado a definitiva su petición de 8 años de prisión para el acusado. El juicio ha quedado visto para sentencia. El fiscal Miguel Angel Carballo considera que acogía en la vivienda que arrendaba en la calle Virgen del Coro de Madrid a radicales islamistas para su posterior traslado fuera de España. En el local vivieron varios de los condenados por la masacre y se organizaban reuniones para la difusión de postulados yihadistas.
La otra acusación personada en el juicio, la Asociación de Ayuda a las Víctimas del 11-M, también solicita una condena de 8 años para el acusado. Tanto el Ministerio Público como la asociación destacaron el hecho de que el acusado haya renunciado en el juicio a prestar declaración.
Almallah Dabbas no pudo ser juzgado junto con el resto de acusados por los atentados del 11 de marzo de 2004 debido a que se encontraba en aquel momento detenido en Londres, donde residía. Fue entregado en marzo de 2007 a España por las autoridades británicas que le detuvieron el 19 de marzo de 2005 en su casa de Slough (oeste de Londres), un día después de que su hermano Mouhanad fuera arrestado en Madrid.
La Audiencia Nacional le dejó en libertad a la espera de la celebración de la vista oral en octubre de 2008 tras abonar una fianza de 10.000 euros impuesta por el juez Eloy Velasco, que le imputaba en fase de instrucción la comisión de un delito de pertenencia a organización terrorista.
Su hermano, Mouhanad Almallah Dabbas, que se encontraba entre los acusados en el juicio del 11-M, fue absuelto por el Tribunal Supremo en sentencia firme después de que la Audiencia Nacional le condenara a 12 años de cárcel por pertenencia a organización terrorista.
En el local propiedad del sirio se mantenían encuentros de adoctrinamiento 'yihadista' en los que se utilizaban soportes audiovisuales, informáticos y de audio. En el sótano de la vivienda se guardaban textos referidos al líder de Al Qaeda, Osama Ben Laden, para su distribución, ha destacado en su informe el fiscal.
En esas reuniones participaron, entre otros, varios de los suicidas de Leganés, como Asri Rifat Anouar, los hermanos Rachid y Mohamed Oulad Akcha, Allekema Lamari y Serhane Ben Abdemajid, 'El Tunecino', que ejercía como líder del grupo. La vivienda llegó a estar ocupada por dos de los condenados por el atentado, Basel Ghalyoun y el marroquí Fouad El Morabit. El fiscal Carvallo destaca además que Moutaz Almallah usaba "estricta medidas de seguridad en las comunicaciones telefónicas".
Carballo ha puesto de manifiesto la relación de Almallah Dabbas con destacados islamistas radicales como Serhane Abdelmajid, conocido como 'El Tunecino' o el jefe de la célula de Al Qaeda en Masdrid, Abú Dahdah, a quien le unían "lazos íntimos".
Una vez este último ingresó en la cárcel el acusado "tomó el relevo" --ha expuesto el fiscal-- que ha agregado abandonó España "cautelosamente" para trasladarse a Reino Unido tras las detenciones de la 'Operación Dátil'.
"Tantas relaciones con tantas personas tan significadas no pueden ser simplemente casualidad o azar", ha asegurado Carballo. También ha puesto de manifiesto que 'El Tunecino' se reunía con Almallah en sus desplazamientos a España "en fechas cercanas al 11-M".
Por su parte, el abogado defensor del acusado, Jesús Andujar -que también representó a su hermano-- ha pedido la libre absolución de su cliente.
'CARTAGENA' HA OLVIDADO TODO
Durante la sesión declaró como testigo el confidente conocido como 'Cartagena' que dijo conocer sólo de vista al acusado, al que veía en una cafetería que regentaba.
'Cartagena', que acudió a declarar vestido con chilaba, pañuelo y el bonete blanco conocido como taguia, portaba, además una tupida baba. El presidente del tribunal, Fernando García Nicolás le pidió que se descubriera la cabeza retirando tanto el pañuelo como el gorro antes de comenzar a prestar testimonio.
A pesar de reconocer que realizó "muchos informes" para la policía previos a los atentados del 11 de marzo, 'Cartagena' destacó que ya no recuerda nada. "Ya intenté olvidarme de todo, han pasado más de 10 años, tampoco quiero saberlo ya", ha dicho.
