Acusado de lanzar 'cócteles molotov' contra la sede de la Subdelegación en Álava dice que creía que "iban a hacer pintadas"

MADRID 22 Sep. (EUROPA PRESS) -

El acusado de lanzar diversos 'cócteles molotov' contra la sede de la Subdelegación del Gobierno en Álava el 5 de agosto de 2008, Aliande Hernáez Borinaga, afirmó hoy que "no conocía" la intención de sus amigos y que había ido en condición de "vigilante" mientras ellos iban a "realizar pintadas en la fachada".

Según explicó el acusado, durante el juicio oral en la Sección Segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, unos amigos le dijeron que iban a realizar unas "pintadas" en el edificio de la subdelegación por lo que él "sólo tenía que vigilar" en las calles cercanas. No obstante el acusado explicó que se cubrió el rostro con el fin de "no ser identificado", debido a que había cámaras de seguridad, y que se puso unos guantes "sólo por la tensión del momento".

Unas declaraciones que se contradicen con la acusación realizada por al Fiscalía quien, y tras presentar a varios testigos, elevó a definitiva su petición de cinco años de cárcel para Aliande Hernáez por lanzar, junto con otras personas no identificadas, 16 artefactos incendiarios contra la Subdelegación del Gobierno en Álava, contra un vehículo de la Policía Municipal de Victoria y un coche de la Guardia Civil. Los hechos causaron daños valorados en 14.346,12 euros.

ACTUACIÓN "TÍPICA" DE LOS 'KALE BORROKA'

Asimismo, según explicó la Fiscalía, el acusado fue detenido, tras "tirar" supuestamente los artefactos incendiarios, por varios Guardias Civiles vestidos de paisano, quienes durante la comparecencia oral informaron de que presentó "resistencia", una actitud "violenta" y que pidió "auxilio" a sus compañeros. "Ésta es la forma de actuar típica de los 'kale borroka'", señaló uno de los testigos.

En este sentido, los testigos presentados por la acusación indicaron que en el momento en el que el grupo compuesto por ocho personas pasó por su lado llevaban "varias botellas en la mano" que, a continuación, "tiraron" contra la sede y contra los vehículos de los agentes. Un grupo al que, según aseguraron, pertenecía Aliande Hernáez ya que, en el momento en el que le detuvieron "iba con la misma vestimenta que los demás".

Por otra parte, durante el juicio oral también participaron los peritos encargados de recoger las muestras de los 'cócteles molotov' así como los responsables de obtener las pruebas documentales del suceso. Todos ellos coincidieron a la hora de calificar al acto como "terrorista" ya que fue "premeditado" y buscaba "el temor y la alarma social". "Estas actitudes se producen siempre en apoyo a la banda terrorista ETA", aseguró la Fiscalía. Por último, la Sección Segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional dejó el juicio visto para sentencia.