Un acusado de matar a un matrimonio en El Casar (Toledo) en 2002 niega su participación en los hechos

TOLEDO 6 Abr. (EUROPA PRESS) -

J.L.A, uno de los acusados que supuestamente formaba parte de banda criminal que en octubre de 2002 acabó, a base de hachazos, con la vida de un matrimonio en el Casar de Escalona (Toledo) ha negado su participación en los hechos.

Este juicio, que se celebra en la Audiencia Provincial de Toledo, tiene lugar después de que el acusado haya sido encontrado y detenidos tras darse a la fuga, y de que el resto de componentes de la banda criminal hayan sido juzgados ya por los mismos delitos.

Así, durante la vista oral, el procesado ha explicado que no se fugó de España, y que tuvo que ir Colombia porque las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), habían amenazado a sus padres. Además, ha añadido que permaneció tanto tiempo en este país porque le pegaron cuatro tiros y le dejaron "medio muerto".

También ha dicho en este sentido que estuvo hospitalizado en la Cínica el Bosque de Bogotá, y ha añadido que todos estos datos pueden corroborarse preguntando tanto a la Fiscalía de Colombia como a la propia clínica.

En este sentido, ha asegurado que su intención era presentarse al juicio en el que se juzgaron al resto de componentes de esta banda criminal y que prueba de ello, ha añadido, es que firmaba cada ocho días en los juzgados de Plaza de Castilla de Madrid.

HECHOS

Respecto a los hechos, para los que el Ministerio Fiscal pide para el acusado un total de 40,6 años de prisión por un delito de asesinato, otro de secuestro y otro contra la salud pública. J.L.A ha asegurado que es conocedor de los mismos porque le informaron cuando fue detenido.

Los hechos ocurrieron en octubre de 2002 cuando el acusado y el resto de los miembros de la banda criminal, que ya han sido juzgados, encargó al matrimonio la distribución de sustancias estupefacientes por valor de 30.000 euros.

Según el fiscal, como quiera que los mencionados intermediarios no procedieron a reintegrar el precio obtenido por la transacción a la banda criminal, ésta decidió amedrentarlos para recuperar el dinero procedente del tráfico de droga.

Así, el fiscal establece que atrajeron al matrimonio a una segunda supuesta operación para, más tarde, privarles de su libertad exigiendo como rescate, a personas cercanas al matrimonio, el pago de lo adeudado si querían recuperar su libertad, y amenazarles de muerte en caso contrario.

En este sentido, en un chalet situado en El Casar de Escalona, el fiscal afirma la banda criminal consiguió atraer al matrimonio, privarle de su libertad y acabar con la vida de ambos al fracasar el plan para hacer efectivo el rescate.