ADIF subraya que sólo el 1,7 por ciento de los daños en inmuebles por las obras del AVE en El Prat son "relevantes"

Los últimos informes descartan riesgos de rotura o fallo estructural en los edificios y recalca su compromiso con la seguridad

Europa Press Nacional
Actualizado: miércoles, 14 marzo 2007 14:28

MADRID, 14 Mar. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF), Antonio González Marín, subrayó hoy que, según los últimos informes encargados por su organismo a expertos independientes, "sólo el 1,7 por ciento" de los inmuebles (viviendas, locales y zonas comunes) presentan daños "relevantes" derivados de las obras del AVE a su paso por El Prat (Barcelona). Además, aseguró que todos estos edificios "ya presentaban daños cuando fueron inspeccionados al inicio de las obras".

Durante su comparecencia a petición propia en la Comisión de Fomento y Vivienda del Congreso de los Diputados, apuntó que las últimas inspecciones realizadas señalan, además, que el 30,1 por ciento de las viviendas no tienen patología alguna; el 38,1 tiene lesiones "no relevantes" (manchas de humedad, microfisuras o desconches de pintura); el 17 por ciento presenta daños "no preocupantes" (no comprometen la estabilidad), y el 13,1 patologías "sujetas a seguimiento" (se ha observado en ellas desde la primera campaña un incremento en los daños, sin que esté comprometida la estabilidad).

En este sentido, comentó otro estudio, encargado por ADIF al Departamento de Ingeniería del Terreno de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC), según el cual "no se detectó en los edificios examinados ninguna situación de riesgo de rotura o de fallo estructural". Eso sí, reconoce que las lesiones observadas tienen su origen en los "movimientos inducidos por la deformación de las pantallas" colocadas para la construcción de los túneles a su paso por El Prat, "como consecuencia de las obras".

Explicó que la UPC utiliza una escala de intensidad de "daños esperables", que son inapreciables, muy ligeros, ligeros, moderados, severos y muy severos. Según esta escala, los daños teóricos obtenidos de la inspección de los edificios afectados "no superarían la categoría de ligeros en cualquier caso". Además, indicó que la UPC comprobó la existencia de "pequeñas" fisuras en algunas viviendas "de cierta antigüedad, de más de 50 años, de estructura muy simple y probablemente de cimentación somera".

Asimismo, señaló que los movimientos asociados a las excavaciones disminuyen con la distancia, de forma que "a una distancia de más de 30 metros de las pantallas, las deformaciones calculadas son muy pequeñas e incapaces de provocar daños en las edificaciones". En cualquier caso, avanzó que se mantendrá toda la instrumentalización de pantallas prevista en el proyecto y la obra se seguirá mediante la observación e interpretación "continua" de toda la instrumentalización ya existente. "Las lecturas establecen que no hay riesgo para las edificaciones colindantes a las obras", resaltó.

En este punto, quiso aclarar que han sido los expertos consultados, no ADIF, quienes han determinado que los desperfectos "no revisten gravedad", si bien aprovechó también para recalcar su compromiso con la seguridad como "valor primordial" y trasladar a los vecinos un mensaje de "confianza". Así, aseguró que ADIF adoptará las medidas correctoras recomendadas por los expertos, los cuales seguirán trabajando en el seguimiento a los edificios afectados por las obras del AVE a Barcelona incluso una vez finalizadas.

COLABORACIÓN CON LOS VECINOS

González Marín recordó que desde que se iniciaron las obras han tenido lugar siete reuniones de información y seguimiento de las obras cada dos meses, con la participación de ADIF, ayuntamiento de El Prat y vecinos. Aseguró que desde que en la reunión del 11 de enero de 2007 se plantearan las primeras reclamaciones de los vecinos sobre desperfectos en viviendas, ADIF adoptó "de inmediato" medidas para reforzar el seguimiento de las obras y la información a los ciudadanos.

Según explicó, ADIF encargó estudios a empresas independientes y añadió que se amplió el perímetro de inspección de inmuebles, algo que podría seguir haciéndose "si así se estimara". Agregó que una de estas empresas se dedicó a la búsqueda de posibles fisuras, con una precisión de décimas de milimetro. "La valoración de patologías está siendo realizada bajo criterios estandarizados del sector y lo que los técnicos han determinado como necesario, se ha hecho", dijo.

Por tanto, resaltó que en la reciente última campaña se programaron 461 inspecciones de inmuebles, de las cuales se realizaron 412. Las conclusiones incluyen la situación del momento actual, así como las patologías de las edificaciones previas al inicio de las obras en el entorno y la potencial evolución que la patología haya experimentando. Además, señaló que se ha incrementado la frecuencia de revisión de cada incidencia y, por ejemplo, una patología relevante antes se seguía dos veces por semana, mientras que ahora se hace "en días alternos".

El presidente de ADIF insistió en que la seguridad es una "premisa básica" en la ejecución de obras, "especialmente cuando se trata de trabajos subterráneos en un entorno urbano". Resaltó la reciente creación de una oficina de geotecnia para reforzar el seguimiento técnico de la ejecución de cada obra y la firma de un convenio en junio pasado con el Instituto Geominero. Además, subrayó el continuo asesoramiento por parte de expertos externos.

En este sentido, aseguró que ADIF ha adoptado todos los consejos sobre seguridad que ha recibido, como por ejemplo, usar inclinómetros para definir con claridad posibles afectaciones sobre inmuebles. Además, afirmó que en El Prat se sumaron instrumentos de control de comportamientos del terreno a los métodos de seguridad habituales, junto a reconocimientos geotécnicos. También se ha prestado especial atención al nivel freático y estudios de impacto hidrogeológico, para lo cual ADIF "colaboró con la Agencia Catalana del Agua".

HASTA SANTS A FINALES DE 2007

Por otro lado, González Marín afirmó que Fomento está "en condiciones" de cumplir el compromiso del Gobierno de poner en servicio el tramo del AVE hasta la Estación de Sants a finales de 2007, al tiempo que resaltó que el actual equipo del Ministerio heredó una "situación de hechos consumados que le dio poco margen de maniobra" debido a que los canales de acceso a Barcelona "ya estaban definidos". "Fueron los gobiernos del PP en Madrid y CiU en Cataluña los que ratificaron el trazado del AVE, a pesar de que se trataba de la opción más compleja", aseguró.

Así, señaló que la complejidad actual de la obra "reside en el trazado elegido". Eso sí, destacó que a pesar de la "complejidad" de las obras y las "molestias" a los vecinos, El Prat será uno de los municipios más beneficiados cuando finalicen los trabajos, ya que se convertirá en un "centro intermodal en el que se unirán los servicios de AVE, Cercanías, Metro y autobuses, lo que hará de él un nudo de comunicaciones fundamental en Barcelona y toda Cataluña".

"En este municipio estamos construyendo una nueva estación soterrada para Cercanías y AVE, en la que sólo para la vertiente convencional se han invertido 87 millones de euros, algo que es fiel reflejo del compromiso de ADIF con un servicio de Cercanías de calidad. Esta estación tendrá cuatro vías de Cercanías y cuatro de AVE, con más de 20.000 m2, dotada de medios técnicos modernos y accesible a personas con discapacidad", explicó.

Para concluir, afirmó que El Prat se va a ver beneficiado por el paso del AVE porque se van a soterrar 1.328 metros de vías, liberando así casi 30.000 m2 de terreno para la ciudad, "mejorando la calidad urbana del entorno". Además, insistió en que se están adoptando "todas las medidas posibles en favor de la tranquilidad de todos" y ADIF trabaja para que el AVE "llegue cuanto antes a Barcelona".

Contenido patrocinado