El alcalde de Barcelona pide un frente común de los partidos del consistorio ante unos PGE "tremendamente injustos"

Xavier Trias, Alcalde De Barcelona
EUROPA PRESS
Actualizado: miércoles, 11 abril 2012 17:00

Censura aportaciones para inversiones de "dudosa utilidad" económica como el AVE a Galicia

BARCELONA, 11 Abr. (EUROPA PRESS) -

El alcalde de Barcelona, Xavier Trias, quiere hacer un frente común con los partidos del consistorio para intentar hacer piña en Madrid ante los Presupuestos Generales del Estado (PGE), que ha calificado de "tremendamente injustos" con una ciudad que ha sido seria y ha hecho los deberes en economía.

En rueda de prensa, ha explicado que se reunirá con los grupos municipales para consensuar una respuesta barcelonesa en forma de enmiendas a plantear en el trámite parlamentario, y después, con los ministros de cada área cuyas aportaciones se han visto mermadas para ver cómo se pueden hacer correcciones, ante lo que se ha mostrado optimista: "Confío en que la negociación dará sus frutos".

Para el alcalde, es el momento de apretarse el cinturón, pero "lo que no tiene sentido es que se castigue a aquellos que pueden ser motores y ayudar a la recuperación económica de todo el país", como es el caso de Barcelona, ante lo que ha abogado por actuar con la máxima prudencia y seguir siendo estrictos y serios presupuestariamente.

Trias no ha ahorrado en calificativos con tintes negativos sobre los PGE de Mariano Rajoy, de forma que tendrán "una implicación muy negativa" para la ciudad al referirse a que las previsiones fijan que la provincia de Barcelona recibirá un 48% menos de aportaciones estatales, y espera ver cómo afectara la reducción de aportaciones a la Generalitat para políticas sociales.

Uno de los ejemplos más ilustrativos lo ha dado con cultura, en el que casi 20 instituciones (como el Gran Teatro del Liceo) recibirán 21 millones, frente a los 31 del año anterior --y las subvenciones directas del ministerio pasan de 18 a 14--, mientras que sólo el Museo de El Prado de Madrid aumenta un millón, hasta los 44,7, y el Reina Sofía baja un poco, pero recibirá otros 42 millones.

Al preguntársele si situaciones como esta supondrán recurrir a la inversión privada, ha ironizado con que "las tragedias, por pasos", y que primero deben conseguir ver si se arregla la situación, sobre la que no tira la toalla, y que se ha producido sin que haya habido consulta previa del Gobierno al Ayuntamiento sobre la reducción de las aportaciones.

Cree que es "una vergüenza" que las cuentas no contemplen los accesos viarios y ferroviarios definitivos al Puerto ni los de Rodalies al Aeropuerto; una historia para no dormir que no se detallen fondos para ampliar la estación de Sants, y una absoluta locura la reducción a la mitad en dos años de los de la Autoridad del Transporte Metropolitano (ATM), de 200 millones en 2010 a los 101 este año.

Ha agregado que sería absolutamente impresentable y un escándalo que la inversión para el Plan de Rodalies se quedara en 1,5 millones, y que no haya una apuesta por el corredor mediterráneo ferroviario, lo que ha contrapuesto a inversiones de dudosa utilidad económica: "Uno se queda sorprendido de ver inversiones del AVE en Galicia se mantengan en cifras que no puedo entender".

También ha criticado la "ingerencia increíble" que, según él, supone la restricción de contratar hasta un máximo del 10% de la tasa de reposición de la Guardia Urbana y los Bomberos, lo que les imposibilita tirar adelante la convocatoria de 200 urbanos y 60 bomberos para este año para compensar las jubilaciones.

Con todo, Trias ha reclamado aclarar las cuentas sobre el papel y concretar las aportaciones por escrito en ámbitos como los accesos definitivos al Puerto, para el que el PP asegura que las cuentas incluyen un fondo de 22 millones, y la inversión de Rodalies, para la que hay una aportación genérica a este transporte independientemente de los 1,5 millones para las de Barcelona.

APROBAR UN NUEVO PEF

El Ayuntamiento deberá reformular su Plan Económico Financiero (PEF), en lo que espera el apoyo del resto de grupos --empezando por el PP, con quien pactó las cuentas--, ante otros cambios en las aportaciones del Estado, capítulo en el que si bien recibirá 117 millones extra que el Estado debería haberle aportado en 2010, este año prevé una disminución de 17 millones.

Con los 117 millones, que recibirá en dos plazos, el consistorio buscará financiar alguna inversión que no ha detallado y alcanzar el déficit cero este mismo año, para lo que debe cambiar el PEF, y este objetivo es condición para que el Estado permita devolver en 10 años --en lugar de cinco-- los más de 300 millones que Barcelona le debe tras las liquidaciones de cuentas del 2008 y 2009.