El alcalde de Ponte Caldelas desvincula el sellado de un colegio de la polémica por el realojo de familias gitanas

PONTEVEDRA, 9 Mar. (EUROPA PRESS) -

El alcalde de Ponte Caldelas (Pontevedra), Perfecto Rodríguez, desvinculó hoy el sellado de las puertas del colegio electoral de Caritel con la polémica surgida por el realojo de familias gitanas cuyas viviendas fueron derruidas en el poblado de O Vao, en el ayuntamiento de Poio.

"Este acto de vandalismo es lamentable", aseveró el edil de Ponte Caldelas, quien añadió que "es habitual que en un sitio donde existe un conflicto --por O Vao-- otros aprovechen para hacer vandalismo". Expresó su "condena total" ante este incidente que, no obstante, no impidió el inicio normal de la jornada, después de que los operarios municipales forzasen la puerta.

Asimismo, en esa misma localidad se quemó un contenedor, de lo que "se desconoce la autoría". No obstante, y tras visitar las diez mesas electorales existentes en Ponte Caldelas, el alcalde señaló que la jornada transcurre con normalidad.

PARTICIPACIÓN

En otras localidades de la área pontevedresa, el frío y la lluvia restaron afluencia de público a las urnas, según los alcaldes de Barro, Campo Lameiro, Forcarei y Cerdedo. Este último, José Balseiros, señaló que a media mañana la participación rondaba el 17%, lo que atribuyó a las bajas temperaturas y al aguanieve que había caído en algunos momentos.

"Cerdedo es un municipio donde en las elecciones autonómicas y generales se produce mucha abstención", apuntó alcalde, que precisó que "mucha gente vive en Pontevedra y al ver que está mal día, no se desplazan a votar". Su homólogo de Forcarei, David Raposeiras, también atribuyó a que "la mañana estuvo muy fría" la baja participación, que a mediodía era del 23 por ciento en esa localidad.