Alfonso Guerra sostiene que el PP puede ganar ganar las elecciones "sin aumentar un solo voto"

Actualizado: viernes, 4 enero 2008 16:14

Opina que la clave estará en la movilización de los abstencionistas

MADRID, 4 Ene. (EUROPA PRESS) -

El ex vicepresidente del Gobierno Alfonso Guerra sostiene que el PP puede ganar las elecciones del próximo 9 de marzo "sin aumentar un solo voto" en función de los socialistas que decidan abstenerse, a pesar de que las encuestas "no avalan" una victoria 'popular' y sitúan al PSOE "con más opciones electorales".

En un artículo publicado en el número de la revista 'Tiempo' que hoy sale a los kioscos, Guerra explica que, de cara a las generales, el porcentaje de electores "con una orientación política clara pero con un débil ánimo para acercarse a las urnas" será clave para dar la victoria a un partido o a otro.

Por ello, tras subrayar la "irrelevancia de los cambios en las opciones electorales", el histórico dirigente socialista indica que lo realmente "importante" es saber "cuántos de estos electores que mantienen sus preferencias electorales ejercerán efectivamente el derecho de voto".

INFLUENCIA DE LA PRENSA, EL PP Y LA IGLESIA

En su artículo, Guerra se refiere a los estudios que reflejan que existe un sector del electorado de izquierdas que, aunque se siente próximo al PSOE, "tiene muchas dudas sobre la intención de ir a votar" y concluye que, si deciden no acudir a las urnas, será "bien porque no está de acuerdo con alguna decisión puntual del Gobierno, bien porque le ha hecho mella el sistemático intento de erosión del Gobierno por parte de un sector muy hostil de la prensa, por el PP o por la jerarquía eclesiástica".

De esta manera, dado que "la propensión a la abstención es más acusada entre los electores del PSOE", el que fuera vicepresidente del Gobierno de Felipe González durante casi una década considera que los socialistas deberán "movilizar" a los abstencionistas, en cuyas manos está el resultado de los comicios, ya que "su abstención sería un voto al Partido Popular, aunque ello no esté en su intención directa al no acudir a las urnas".

En este punto, lanza un mensaje al posible electorado de izquierdas que pueda ver con preocupación el papel "más relevante de lo deseado por la población española" que han tenido en algunos momentos de esta legislatura "pequeños grupos nacionalistas". Así, les advierte de que si rechazan que estos grupos "adquieran una importancia desproporcionada", deberían ser consecuentes en la cita con las urnas y "procurar una fortaleza de gobierno que no puede lograrse más que con un número de diputados que no le haga necesitar continuamente de grupos políticos de una relevancia relativa".

Alfonso Guerra pone punto y final a su artículo rechazando el "tópico" tantas veces repetido de que el electorado nunca se equivoca: "Los electores a veces aciertan, a veces se equivocan", indica, antes de recalcar que los partidos políticos deben "exponer con claridad, sin ambigüedades, las pautas de conducta que tendrán si se les concede la posibilidad de gobernar" y los ciudadanos, elegir "la opción que más puede beneficiar" al conjunto de la sociedad.