Altos cargos de Junta niegan que la obra autorizada a Marcos Eguizabal dañase la flora del Cabo de Gata en Almería

Actualizado: lunes, 7 julio 2008 16:36

ALMERÍA, 7 Jul. (EUROPA PRESS) -

Los cuatro altos cargos de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, procesados por la presunta comisión de hasta seis delitos contra la flora del parque natural Cabo de Gata-Níjar (Almería), descartaron hoy ante el juez que la autorización para una obra en una finca propiedad del bodeguero Marcos Eguizabal afectase al endemismo 'androcymbium europeaum' y defendieron su actuación como "ajustada al principio de precaución con mínimo daño a las especies".

Durante la vista oral celebrada en el Juzgado de lo Penal número uno de Almería, tanto el secretario de Patrimonio Natural y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía, José Guirado, como el ahora director de la Agencia Andaluza del Agua (AAA), Juan José Luque, negaron "relación personal" con el empresario riojano, quien no compareció en sala.

Guirado, para quien "seguro no se produjeron pérdidas de ejemplares" de la especie durante la obra promovida por la mercantil 'Círculo Agroambiental' en 2004, explicó que el tendido de la tubería de riego se realizó "por la zona de servidumbre y dominio público" de la comarcal ALP-202 y, por tanto, excluida de la clasificación como zonas A y B de especial protección dentro de la cartografía del espacio natural.

Tildó, asimismo, de "prioritario" el servicio autorizado a la empresa de Eguizabal y señalo que el paraje afectado, donde según la querella de Ecologistas en Acción se "destruyeron' 20.000 ejemplares de 'androcymbium europeaum', "se encuentra muy antropizado" por lo que se considera "área de infraestructuras preexistentes".

Si bien los cuatro procesados se negaron a responder a las preguntas del letrado de la acusación particular y no tuvieron que hacerlo ante la inhibición del Ministerio Fiscal, la actual directora del espacio protegido, Rosa Mendoza, se ratificó en su informe ambiental que recogía que sólo se habían detectado "15 ó 20 ejemplares" de una población de flora que, "sin duda --enfatizó-- ha mejorado a lo largo de los últimos años".

Al hilo de esto, matizó que el citado informe exigía que la maquinaría que se empleó en el tendido de la tubería de 30 centímetros "se colocase" en la zona de servidumbre para que no se produjera "afección alguna" a esta especie que, según aseguró, se preservó "extrayendo los bulbos y las semillas para su posterior replantación".

En la misma línea se expresó en su testimonio ante la sala presidida por el juez decano, Luis Columna, el que fuera director del parque natural de Cabo de Gata-Níjar, Ramón Huesa, para quien el trazado escogido "era el pasillo idóneo en un sitio ya degradado" y se cumplieron además las medidas correctoras definidas para que el paraje se recuperase con "normalidad".

Los cuatro altos cargos, quienes recordaron que "ningún" agente de Medio Ambiente "detectó nada raro durante la obra" y que conocieron la denuncia "después de que un juez solicitase informe en 2001", se volverán a sentar en el banquillo de los acusados el próximo día 9, cuando será el turno de los testigos mientras que los peritos están citados el día 10.

La causa, de la que ya fueron absueltos por el Juzgado de lo Penal número uno en diciembre de 2006 al observar un "defecto de forma" en el escrito de la acusación, se aplazó por última vez el pasado mes de octubre después de que la Audiencia Provincial decretase la nulidad al entender que no se podía fallar tras una vista oral celebrada sin acusación tras retirar los cargos el Ministerio Fiscal.