AMP-Congreso manda la reforma del Código Penal al Senado con el voto favorable de PSOE, CiU y ERC y la abstención del PP

Actualizado: jueves, 29 abril 2010 14:39

Los socialistas reprochan al PP su "absoluta y total deslealtad", que atribuyen al endurecimiento punitivo frente a la corrupción

MADRID, 29 Abr. (EUROPA PRESS) -

El Congreso de los Diputados aprobó hoy el proyecto de ley para la reforma del Código Penal, con el voto favorable del PSOE, CiU, ERC, CC y UPN, mientras que PNV y NaBai rechazaron el texto y PP, IU-ICV y BNG se abstuvieron. La falta de apoyo de los 'populares' provocó duras críticas del portavoz de Justicia del Grupo Socialista, Julio Villarrubia, quien les reprochó su "absoluta y total deslealtad" ante un texto "negociado sin límite" y que este diputado atribuyó al endurecimiento punitivo frente a los delitos de corrupción.

Durante el debate previo a la votación del dictamen que la Comisión de Justicia aprobó la pasada semana, también con la abstención del PP, el portavoz socialista defendió que el principal partido de la oposición deberá "explicar" su negativa a apoyar el proyecto de ley, con el que había "comprometido" su voto. "Una vez más ustedes demuestran que no son de fiar, no son en absoluto de fiar", lamentó Villarrubia, provocando los aplausos de sus compañeros de bancada.

El diputado socialista defendió que el PSOE ha cumplido con su compromiso y ha buscado "el mayor consenso dentro de temas complejos" y en los que había "sensibilidades distintas", llegando finalmente a una reforma que "mejora" el proyecto del Gobierno.

Por ello, y porque el PSOE ha "asumido bastantes propuestas del PP" a pesar de que algunas eran "duras de aceptar", se mostró sorprendido por la falta de apoyo de los 'populares'. A ellos, les recordó que los asuntos no aceptados, como la prisión perpetua revisable, que no contó con buena acogida entre ningún grupo, o la ampliación de la libertad vigilada, ya eran "conocidos de antemano" y "debían formar parte de la discrepancia conocida y pactada entre el PP y el PSOE"

Villarrubia explicó entonces que la "única parte importante modificada" ha sido el incremento de las medidas para la lucha contra la corrupción pública y privada, algo con lo que "parece no estar de acuerdo el PP". "Sería bueno que explicaran por qué les resulta fácil ser tan fuertes con los débiles y tan débiles con los delincuentes de cuello blanco a los que ya beneficiaron con la reforma del 2003", lanzó el diputado socialista, interrumpido por los aplausos de sus colegas de partido.

El portavoz del PSOE recordó que con esta reforma se ha endurecido el Código Penal en delitos de terrorismo, contra la libertad sexual, especialmente la de los menores, y de corrupción, aspecto éste último en el que reconoció expresamente la contribución de ERC.

"Quizás esto no le ha gustado al PP y por eso le ha llevado a reconsiderar su comprometido voto con la reforma, con una absoluta y total deslealtad con la forma y el fondo impropio de lo que debe ser en la práctica la noble actividad política", insistió Villarrubia. "España no se merece una oposición como ustedes", remachó.

"DEMASIADOS HUECOS" PARA EL PP

El portavoz de Justicia del PP, Federico Trillo, anunció en el debate la abstención de su grupo, a pesar de que reconoció que su partido ha trabajado con el Gobierno y con el Grupo Socialista y ha podido "contribuir en no pocos aspectos que han mejorado el Código Penal de 1995".

Sin embargo, aseguró que los 'populares' no pueden apoyar esta reforma porque tiene "demasiados huecos, demasiadas sombras, demasiadas inquietudes" y, en concreto, denunció que no se ha conseguido "disminuir la complejidad del sistema de penas, ni aumentar la eficacia de la pena de privación de libertad, ni se ha dado respuesta a la reincidencia, la reiteración y la multirreincidencia".

En opinión de Trillo, el texto enviado por el Gobierno "se ha perjudicado con alianzas políticas coyunturales" que ponen de manifiesto que las "mejoras" para el endurecimiento de penas han sido "estrictamente cosméticas", en el caso de sus "aliados" por la izquierda, y "mágicas o ridículas" en el caso de las pactadas con CiU.

A su juicio, lo "más chusco" de todo ha sido la introducción del arresto de fin de semana para los delincuentes multirreincidentes, algo que pasará "a los anales del derecho penal" y que definió como "sinceramente esperpéntico".

En cambio, lamentó, el PP no ha encontrado apoyo para la introducción de la prisión perpetua revisable, de la que en Europa, dijo, sólo carecen España y Portugal, ni para la imprescriptibilidad de los delitos de terrorismo en los que medien secuestro o lesiones graves. "El Código Penal en su última andadura por el Congreso ha sido un parcheo", denunció Trillo, para después advertir de que "aumentará la inseguridad".

CiU y ERC, satisfechos

En cambio, el portavoz de CiU, Jordi Jané, se mostró satisfecho con el resultado del trámite parlamentario y se jactó de que la reforma ha sido "parcialmente pactada" con su grupo en aspectos que el texto enviado por el Ejecutivo "no resolvía de manera adecuada" y en los que ahora "se ha avanzado en la línea de las enmiendas que proponía CiU".

En concreto, destacó los acuerdos alcanzados con el Gobierno para la lucha contra la multirreincendia y que, aunque no serán "una varita mágica", sí pueden contribuir a acabar con esta problemática que afecta de manera especial a Cataluña.

Por su parte, el portavoz de ERC, Joan Ridao, sostuvo que entre el proyecto de Ley que llegó a la Cámara Baja y el dictamen aprobado por la Comisión de Justicia hay "notables y satisfactorias diferencias", que han conducido a sus diputados a votar favorablemente.

En concreto, y aunque lamentó que con esta reforma no se haya "reducido el programa expansivo punitivo" y hace "seguidismo de una corriente de supuesta alarma social", el texto final mejora el tratamiento a delitos relacionados con la corrupción, como el cohecho, el tráfico de influencias y los delitos urbanísticos y medioambientales", lo que les ha llevado a apoyarlo.

Su compañero de grupo, el diputado de IU, Gaspar Llamazares, sin embargo, se abstuvo en la votación, al considerar que ésta ha sido "una oportunidad perdida para el cambio en el modelo penal español, excesivo y punitivo al máximo". No obstante, también reconoció que se han producido "avances significativos" con una "mayor sensibilidad" frente a delitos como los medioambientales.

PNV EN CONTRA POR LA "FRIVOLIDAD" LEGISLATIVA

El portavoz del PNV, Emilio Olabarria, expresó su malestar con la reforma defendida por el Gobierno y ahora aprobada por la Cámara Baja y que, según sostuvo, responde a "la frivolidad como método legislativo". El diputado nacionalista denunció que se dé una respuesta punitiva a algunos problemas sociales "muchas veces de escasa entidad" y se refirió en concreto a las medidas contra la multirreincidencia, que "pueden no afectar a más de 30 delincuentes".

En opinión de Olabarria, el recuperado arresto domiciliario de fin de semana, que busca "ubicar en las camas calientes que abandonan los presos con permisos" a los autores reincidentes de hurtos puede llevar a España "ubicarse en el Guiness".

Tras la votación, el ministro de Justicia, Francisco Caamaño, defendió que el Gobierno y el PSOE es "fiel a la palabra dada" y busca siempre "un proyecto proporcionado y un equilibrio exacto entre las necesidades punitivas de España". A su juicio, hoy ha quedado demostrado que "la mayoría de la Cámara se encuentra satisfecha con esta fórmula".

El texto, al que no se introdujo ninguna enmienda durante el debate de hoy, se enviará ahora el Senado, donde primero será analizado en Comisión y, después, votado en Pleno. De introducirse algún cambio, volverá a la Cámara Baja, donde se espera que reciba la luz verde definitiva en el mes de junio.