AMPL.- Debate (15).- Zapatero achaca la "mayoría excepcional" de Euskadi al empecinamiento de Ibarretxe con su plan

Actualizado: miércoles, 13 mayo 2009 1:34

Erkoreka evoca a Mayor Oreja y Redondo Terreros y proclama que el PNV ya no se fía de un Zapatero que actúa por "revanchismo"

MADRID, 12 May. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aprovechó esta noche su duelo con el portavoz del PNV en el Congreso, Josu Erkoreka, para recalcar que los nacionalistas vascos eran conscientes de que el empecinamiento de Juan José Ibarretxe en presentar "una y otra vez" su "estrambótico" plan soberanista hacía inviable un posible acuerdo entre PSE y PNV en Euskadi. Precisamente, esas propuestas, apoyadas "con más o menos entusiasmo" por el PNV fueron las que, según Zapatero, han dado lugar a la "mayoría excepcional y extraordinaria" que han sellado los socialistas y los 'populares' vascos.

Zapatero contestó con este argumento a los reproches que previamente le había dedicado Erkoreka en el marco del Debate sobre el estado de la Nación. El portavoz del PNV le afeó su acuerdo con el PP y coincidió con el ex presidente del Gobierno José María Aznar en que con él se culmina la tarea que iniciaron hace ocho años Jaime Mayor Oreja y Nicolás Redondo Terreros.

Erkoreka aseguró que el pacto PP-PSE se proyectó ya en 2001 con una "coalición virtual" que pretendía desalojar al PNV y que, como entonces fracasó, optaron por promover "ilegalizaciones" y por "presionar al Tribunal Supremo".

El jefe del Ejecutivo negó la mayor: "Esto no tiene nada que ver con la antorcha de Aznar; no tengo nada que ver con la etapa de Mayor Oreja y Redondo Terreros ni nada tienen que ver ellos con López y Basagoiti", subrayó Zapatero, recalcando que han sido las "diferencias de personalidad" que, a su juicio, separan a los protagonistas de ambas parejas políticas las que ahora han hecho posible el acuerdo.

"La mayoría que se ha formado en Euskadi en una mayoría extraordinaria y excepcional porque veníamos de una situación insostenible", afirmó Zapatero, tras insistir en que el PNV "sabía muy bien" que los socialistas no podían apoyar un gobierno liderado por Juan José Ibarretxe. "Si hoy hay este gobierno en Euskadi es, sencillamente, por los proyectos cada vez más estrambóticos e inviables, que, una y otra vez Ibarretxe, con el apoyo del PNV, venía presentando", sentenció.

RAZONES FORZADAS

El portavoz del PNV rechazó las "razones forzadas" que, en su opinión, le daba Zapatero culpando a Ibarretxe y le recordó que todos los proyectos que emprendió el ex lehendakari contaban con el apoyo del PNV que gobernaba "con la mayoría absoluta de los vascos". Las palabras del presidente del Gobierno sirvieron a Erkoreka para confirmar, según dijo, que Zapatero había actuado "con revanchismo" y que el pacto entre socialistas y 'populares' se había cerrado en Madrid.

Zapatero, quien le pidió que se plantease si los "diez años de gobiernos de Ibarretxe" no habrían tenido algo que ver en que PSOE y PP fueran capaces de superar la distancia que les separa, le replicó sacando a colación los pactos que el PNV suscribió con Aznar en 1996. Ante este recordatorio, Erkoreka señaló que en esa etapa la única candidatura "viable" era la del entonces líder del PP porque el PSOE había "saqueado la Hacienda pública" y estaba rodeado de "enormes casos de corrupción".

Pese a este intercambio de opiniones, Zapatero dijo comprender la reacción que ha tenido el PNV, pero recomendó a Erkoreka que después de "volcar toda la acritud" inicial, "si puede" piense en el futuro, porque las convocatorias electorales "se suceden muy rápido". "Todos los malos tragos se pasan. Admita, aunque sea un centímetro que en este caso también otros pueden tener sus razones", agregó Zapatero.

"¿A DÓNDE VA EL PNV?"

Durante su rifirrafe, Zapatero y Erkoreka se cruzaron reproches, pero el enfrentamiento fue menor en su último duelo parlamentario, fundamentalmente porque el jefe del Ejecutivo evitó el cuerpo a cuerpo e incluso renunció a su tercer turno.

Aunque descalificó, tachándolo de "historieta", el análisis sobre la soledad parlamentaria del PSOE que había realizado el portavoz del PNV, Zapatero eludió responder específicamente a las "lindezas" que le había dedicado su contrincante y subrayó que siempre estará dispuesto al diálogo con su partido.

"Sé muy bien que la situación en Euskadi es muy difícil pero, para mí merece la pena y por ello no voy a contestar algunas de las apreciaciones que ha hecho. En este momento necesitamos abrir la puerta a un tiempo de reflexión, sosiego y tranquilidad y las tribunas para eso a veces son un peligro porque todos tenemos la pasión contraatacar, refutar y zaherir. Prefiero transmitirle simplemente que le entiendo, pero esperemos que en el devenir, las cosas puedan ser de otra manera", apuntó Zapatero.

Eso sí, quiso dejar muy claro a Erkoreka que "el PSOE sabe muy bien dónde va" y que lo que muchos, incluido él, están esperando es "a ver a dónde va a ir el PNV".

Zapatero separó claramente sus referencias a Ibarretxe del capítulo que dedicó a glosar la cooperación que demostró el PNV durante el frustrado proceso de paz, con especiales menciones al entonces presidente de los nacionalistas vascos, Josu Jon Imaz. Respondía así después de que Erkoreka recordara cómo, tras el atentado que puso fin la última tregua de ETA, había elogiado la actuación del PNV durante el alto el fuego.

ELOGIOS A IMAZ

"Entonces nos calificaba como personas responsables y hoy somos exactamente los mismos", le espetó Erkoreka acusándole de dar a entender en su pacto con el PP que mientras el PNV gobernaba Euskadi no tuvo un "compromiso real, serio y efectivo en la lucha contra ETA".

El presidente del Gobierno suscribió todos los piropos que dedicó en 2007 al PNV por su colaboración durante la tregua. "No tengo ningún reproche en esa etapa en la lucha por alcanzar el fin de la violencia, tampoco para Ibarretxe, aunque sí posterior", apunto, antes de recordar lo mal que vivió escuchar después al entonces lehendakari decir que quería negociar con él lo que, desde su punto de vista, Zapatero había estado abierto a negociar con ETA. "Fue profundamente triste, habíamos trabajado codo con codo con Imaz al frente", recordó.

Por último, Zapatero garantizó que cumplirá los compromisos presupuestarios que pacto con el PNV y que su voluntad de entendimiento con todos los partidos vascos y su "respeto profundo a la identidad vasca" siguen vigentes. "La mejora del autogobierno se va a producir, pero del autogobierno dentro del Estatuto de autonomía", puntualizó.

Pero el presidente no convenció a Erkoreka quien puso fin a su intervención proclamando que el PNV ha confirmado que Zapatero "ya no es fiable". "No nos ofrece ninguna credibilidad, es versátil, voluble, imprevisible y veleidoso", concluyó.