AMPL.-Ex consejero vasco defiende la "honradez y profesionalidad" de su equipo y descarta irregularidades en Osakidetza

VITORIA, 30 Jul. (EUROPA PRESS) -

El ex consejero de Sanidad, Gabriel Inclán, defendió hoy la "honradez y profesionalidad" de su equipo y descartó, en referencia a las supuestas irregularidades en contratos de Osakidetza en el llamado 'caso Margüello', que durante su mandato haya existido "una trama para realizar negocios turbios". Además, acusó al actual Departamento de Sanidad de haber actuado de forma "inquisitorial" a la hora de denunciar estas presuntas irregularidades.

El pasado 1 de julio, el Departamento de Sanidad hizo público un informe que señala la existencia de "graves irregularidades" en la suscripción de varios contratos entre el Servicio Vasco de Salud y empresas de las que eran socios tres facultativos de Osakidetza, entre ellos el ex director de Calidad de Cruces, José Carlos Margüello.

La investigación de los hechos, que datan del periodo comprendido entre 1997 y 2008, concluye que los facultativos José Carlos Margüello, Eduardo Climent y Francisco Javier Zubiaga compatibilizaban sus cargos en el Servicio Vasco de Salud con su participación como socios en empresas sanitarias como Medical Dom, Recard 2000, Gestión de Servicios Sanitarios XXI y Rehabilidom, a las que Osakidetza contrato diversos servicios en ese periodo.

Inclán compareció hoy ante la Diputación Permanente del Parlamento vasco -el órgano que sustituye al pleno fuera del periodo de sesiones-- para informar sobre las supuestas irregularidades en contrataciones realizadas por el Servicio Vasco de Salud durante su mandato.

Previamente a la comparecencia de Inclán, el actual consejero de Sanidad, Rafael Bengoa, anunció ante la Diputación permanente que el Gobierno vasco esperará a que el Tribunal Vasco de Cuentas Públicas (TVCP) investigue las supuestas irregularidades para decidir si lleva o no el caso a la Justicia.

El ex consejero de Sanidad denunció que, ni él ni sus colaboradores, han sido consultados "en este embrollo que se ha creado", una forma de actuar que atribuyó a un "afán inquisitorial". "Al parecer no han querido que las explicaciones que les hubiéramos facilitado les estropearán las conclusiones que posiblemente tenían decididas antes de empezar el expediente informativo".

"INDEFENSIÓN"

A su juicio, el expediente abierto en torno a este caso "sería nulo de pleno derecho" desde el punto de vista administrativo, debido a la "indefensión" en la que ha dejado a las personas afectadas. "Se pretende hacer creer que ha habido una especie de trama en el Departamento de Sanidad para realizar negocios turbios. Nada más lejos de la realidad; ni he consentido ni consiento nada", proclamó.

En referencia al informe elaborado por el actual Departamento de Sanidad, consideró que "da la impresión de que se estaba buscando cualquier indicio para poder manchar la imagen de las personas que con anterioridad a él habíamos trabajado durante diez años dirigiendo el Departamento de Sanidad, de las que doy fe de su honradez y profesionalidad". "Niego con toda rotundidad que ni mi gobierno ni mi departamento, ni nadie de mi equipo, haya consentido jamás la más mínima irregularidad, ni grave ni leve", aseguró.

Además, denunció la "falta de rigor" del informe, del que dijo que está "lleno de insidias y medias verdades". Según afirmó, el instructor del mismo es "un excelente profesional" pero tiene una experiencia "nula" a la hora de desempeñar este tipo de informes.

El ex consejero de Sanidad aseguró que todas las contrataciones se realizaron "ajustándose a las normas". Respecto a los incrementos de tarifas en algunos contratos, que, según el informe de Sanidad estarían injustificados, aseguró que todos ellos "fueron fiscalizados siempre por el Tribunal Vasco de Cuentas Públicas".

En el caso de una de las contrataciones en la que se produjo un incremento de tarifas, subrayó que este aumento no estuvo destinado a la empresa adjudicataria, sino que se destinó al incremento del número de profesionales sanitarios y de sus salarios que desempeñaban los servicios contratados.

TRIBUNALES

Inclán se mostró partidario de que este asunto sea investigado por la Justicia con el fin de determinar, entre otras cuestiones, cómo es posible que el Departamento de Sanidad haya dado a conocer las identidades de los médicos a los que se refiere el informe sin que la investigación haya concluido aún.

El ex consejero aseguró desconocer la condición de apoderados en las empresas contratadas de alguno de los médicos a los que se refiere el informe, aunque precisó que el desempeño de este cargo en compañías sanitarias privadas y su pertenencia a la sanidad pública "es legal".