Un año de prisión para un paciente que amenazó con degollar y matar a su médico por darle el alta

SANTANDER, 3 Sep. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia Provincial de Cantabria ha confirmado la condena de un año de prisión para un paciente del Centro de Salud de Santoña que amenazó con degollar y matar a su médico por darle el alta y negarse a prolongarle la baja.

De esta forma, en una sentencia conocida hoy, la sección primera de la Audiencia desestima un recurso del acusado y confirma la condena que le impuso a finales de 2007 el Juzgado de lo penal número 2 de Santander por un delito continuado de amenazas.

El origen de los hechos se remonta a diciembre del año 2002, cuando el acusado, José D.V., fue operado de una estenosis aórtica (un estrechamiento u obstrucción de la válvula aórtica que puede ser congénito o adquirido). Tras la intervención, el hombre recibió tratamiento en el Centro de Salud de Santoña donde su médico le dio el alta médica el 3 de agosto de 2003.

Según se explica en la sentencia, el acusado, que no estaba conforme con el alta, acudió a la consulta tres días más tarde y se dirigió al médico en "tono intimidatorio". "Ahora me ves de buenas, pero no sabes cómo me las he gastado yo de malas. Yo soy un tío muy peligroso. He estado en la cárcel, y si no me das la baja, vas a conocer mi otra cara", fueron las expresiones que el acusado dirigió al doctor.

El hombre volvió de nuevo al centro de salud el 26 de agosto preguntando por el médico "en tono muy agresivo" y dando puñetazos en el mostrador del centro. Entonces el personal del mostrador avisó por teléfono al médico, que se encerró en su despacho.

Una vez más, el acusado regresó al centro de salud, el 9 de septiembre, y aseguró a uno de los auxiliares administrativos que iba a "degollar" al doctor. Y dos días más tarde volvió otra vez y entró en la consulta amenazando al médico con matarle y "arruinarle" la vida. Otros trabajadores del centro tuvieron que forcejear con el acusado para que no agrediera al médico.

El Juzgado de lo Penal le condenó por todo ello a un año de prisión por un delito continuado de amenazas con la atenuante de dilaciones indebidas, y le ordenó indemnizar con 600 euros al médico por los perjuicios morales sufridos. Además, le prohibió acercarse a menos de 50 metros del doctor, de su domicilio o su trabajo durante cinco años.

La Audiencia Provincial confirma ahora ese fallo y rechaza las alegaciones del acusado, que pedía ser absuelto o, en todo caso, condenado por una falta, no por delito. La sección primera no admite sus argumentos y tampoco aplica la atenuante de arrebato u obcecación porque, según recalca, en las cuatro ocasiones el acusado se presentó "voluntariamente" en el centro de salud "y de modo inmediato comenzó a amenazar adoptando una actitud violenta".