OURENSE, 5 Jun. (EUROPA PRESS) -
La localidad orensana de A Bola fue la madrugada del miércoles escenario de un incendio en una vivienda "ruinosa" en la parroquia de San Martiño de Berredo, en el interior de la cual se encontró un cadáver cuya identidad está todavía sin confirmar.
No obstante, según indicaron a Europa Press fuentes de la Guardia Civil y del Cuerpo de Bomberos de la Mancomunidad Terras de Celanova que se desplazaron al lugar, las llamas pasaron desapercibidas para los habitantes de las únicas dos casas habitadas de la parroquia, que no se percataron del incendio hasta la mañana siguiente.
Por su parte, la Guardia Civil recibió en el cuartel de Celanova (Orense) una denuncia de un vecino de la también orensana localidad de Verea, M.G.D. de 56 años de edad, en la que hizo constar que su antigua casa paterna "en estado ruinoso" había resultado afectada por un incendio. Además, incidió en la posibilidad de que un hermano suyo, de 38 años de edad, pudiera encontrarse entre los restos del inmueble.
Por ello, los Bomberos, que fueron avisados por la Benemérita a las 15.30 horas, apagaron las brasas y apuntalaron la casa, de la que sólo quedan las paredes de piedra, para que el forense de guardia pudiera entrar a recoger los restos, que fueron trasladados al Complejo Hospitalario de Orense (CHOU) donde se realizarán pruebas para certificar su identidad.
CAUSAS DEL INCENDIO.
Además, fuentes del cuerpo de extinción de incendios confirmaron a Europa Press que la vivienda, "que quedó totalmente quemada", se encontraba "en ruinas, sin luz, ni agua ni nada". Mientras tanto, la Guardia Civil investiga las causas del fuego, aunque avanzaron que "todo indica" que "pudo ser fortuito" y "tal vez cogió al hombre durmiendo".
No obstante, apuntaron que tendrá que ser la investigación de estas fuerzas de seguridad la que finalmente determine el origen de las llamas y que ésta podrá prolongarse durante "unos días o una semana".
NO SE SABE SI VIVÍA EN LA VIVIENDA.
En cuanto a la persona desaparecida a la que podrían corresponder los restos que aparecieron en la vivienda, se desconoce si residía en la vivienda, puesto que, aunque varios vecinos aseguraron a la Guardia Civil que lo veían "por allí", no hay una confirmación oficial de este punto.
Sin embargo, la alcaldesa de A Bola, María Teresa Barge, constató que "él vivía allí por temporadas" aunque aseguró que no era su residencia fija. De este modo, indicó que durante una temporada trabajó como granjero en otra localidad y que "últimamente cuidaba a una señora mayor con la que vivía".
Además, recalcó que esta persona, de la que actualmente se desconoce su paradero, contaba con otras tres casas familiares en el municipio, por lo que concluyó que "no era pobre de recursos, sino de gestión personal", en alusión a los "problemas de dependencia" que sufría este vecino.
También destacó que el ayuntamiento diseñó un programa de rehabilitación para su problema, a la vez que se llevó a cabo un seguimiento para que asistiera a la terapia. "Pero era una persona muy difícil y no iba a la terapia", lamentó a la vez que informó que "no se le puede obligar a nadie a asistir".
ASISTENTE SOCIAL.
Por su parte, la educadora y trabajadora social del Ayuntamiento, contradijo a la primera edil afirmando que "sí asistía regularmente a los centros que se le recomendaron para su tratamiento", así como a las clases de inserción laboral.
Además, añadió que contaba con una Renda de Integración Social de Galicia (RISGA) que los Servicios Sociales le solicitaron hace tres años; y que actualmente convivía con una persona mayor a la que cuidaba y "que lo acogió".
"Hace una semana vino por el ayuntamiento y comentó que hacía meses que no iba por su casa y que estaba muy bien con la señora", recordó la educadora, quien achacó a "falta de entendimiento en la familia" que la casa que fue pasto de las llamas no se hubiera rehabilitado.