TALAVERA LA REAL (BADAJOZ), 22 (EUROPA PRESS)
La Asociación de Profesionales de la Magistratura (APM) opinó hoy que los planteamientos que ha expuesto el presidente de la Generalitat de Cataluña, José Montilla, para exigir la renovación del Tribunal Constitucional (TC) "no tienen ningún tipo de sostén ni de fundamentación" porque en la actualidad, "por razones puramente de inoportunidad temporal", no "puede darse ningún tipo de recusación contra los magistrados".
En cualquier caso, el portavoz de la APM, Antonio García, aseguró a Europa Press que "promover una sustitución de los magistrados que actualmente conocen y han venido conociendo" el Estatuto de Cataluña "sería una error inmenso", ya que de este modo se "dilataría extraordinariamente que la sentencia fuera dictada".
Por lo tanto, instó a "dejar que el Tribunal Constitucional se pronuncie en un ambiente de serenidad" sobre el Estatuto catalán, pero también pidió al alto tribunal que dicte "con urgencia" una sentencia al respecto, porque "eso es lo principal".
De hecho, García hizo hincapié en que la APM tiene "claro" que "lo que tiene que hacer el Constitucional, y a poder ser ya de una vez, es dictar y dar a conocer" su dictamen sobre el Estatut.
No obstante, defendió la profesionalidad de los magistrados que componen el Constitucional por estar convencido de que "son gente honrada, con trayectorias profesionales impecables", por lo que instó a no "confundir la crítica con la denigración y consideraciones rayadas en la injuria y la calumnia", ya que se trataría de "una irresponsabilidad" que desde APM no se puede "tolerar gratuitamente".
ACTOS DE APOYO A GARZÓN
En cuanto a los actos celebrados la semana pasada y ayer en apoyo al juez Baltasar Garzón, García recordó que la APM se ha venido manifestando "muy críticamente con ese tipo de actuaciones" por entender que "se está presionando gravemente al más alto tribunal del Estado".
Por este motivo, reclamó que se permita "el ejercicio independiente de su función para los tribunales de justicia", ya que pese a considerar que "ese tipo de presiones no van a torcer la voluntad de ese tribunal", sí que "confunden mucho a la ciudadanía" y también "dan lugar a un deterioro de la imagen de crédito y de confianza que deben de tener en todo caso los tribunales de justicia".