Arenas y Aguirre afirman que los gobiernos del PP son los únicos que ponen en marcha metros y amplían kilómetros

Actualizado: martes, 20 marzo 2007 20:22

Aguirre destaca que el PSOE-A no ha sido capaz de poner en marcha ni un sólo kilómetro de metro en Andalucía en más de 25 años de gobierno

SEVILLA, 20 Mar. (EUROPA PRESS) -

La presidenta de la Comunidad de Madrid, la 'popular' Esperanza Aguirre, y el presidente del PP-A, Javier Arenas, mostraron hoy su convencimiento, durante un acto en Sevilla, de que los gobiernos del Partido Popular en las comunidades autónomas son los que hacen posible la puesta en marcha de los metros y la ampliación de kilómetros de las líneas.

Aguirre y Arenas clausuraron, junto al candidato del PP a la Alcaldía de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, unas jornadas sobre 'Movilidad en las grandes ciudades, una necesidad social', en las que el tema de la construcción del metro de Sevilla fue protagonista.

Así, la presidenta de la Comunidad de Madrid se mostró convencida de que sólo con Javier Arenas en la Presidencia de la Junta y con Zoido en la Alcaldía de Sevilla, el metro será una realidad en la comunidad andaluza, a un ritmo, según calculó, de unos 20 kilómetros por año.

Resaltó el hecho de que, con el PSOE gobernando en Andalucía durante más de 25 años, el balance sobre kilómetros de metro puestos en marcha en la comunidad ha sido "cero patatero y zapatero". "Ni un sólo kilómetro de metro en Andalucía en 25 años", sentenció la presidenta de la Comunidad de Madrid.

En cuanto a la situación en su región, donde se han construido en la presente legislatura 90 kilómetros más de línea de metro y 80 nuevas estaciones, según resaltó Aguirre, en 12 años de gobiernos del PSOE, se construyeron 14 kilómetros más de línea y, en doce años de ejecutivos populares, 204, de manera que, finalmente, se va a disponer al culminar esta legislatura de una red de metro de unos 317 kilómetros.

El metro de Madrid, según destacó, goza de una gran aceptación por parte de los madrileños, de los que un 48,5 por ciento utiliza el transporte público para acudir a sus trabajos, frente a la media del 19,5 por ciento en el conjunto de España. No quiso dejar de destacar que esta apuesta por el transporte público, que tiene como objetivo garantizar la libertad de movimiento de los ciudadanos, va totalmente en consonancia con el respeto al medio ambiente.

Por su parte, Javier Arenas, que apuntó que el Gobierno de Esperanza Aguirre es para él un "referente de buen gobierno" y de "buenas prácticas", con afán reformista, resaltó que mientras para los madrileños su metro es motivo de "gran orgullo", en Sevilla, la construcción de esta infraestructura se está convirtiendo en un "gran monumento a la ineficacia y al desconcierto y se acabará convirtiendo en un gran escándalo".

Indicó que hoy es un problema real de los sevillanos la movilidad en la ciudad y en el área metropolitana, resaltando su preocupación por la "saturación" existente en la SE-30, de manera que vivir en el área metropolitana y, en especial, en el Aljarafe se ha "convertido en un auténtico infierno".

Javier Arenas mostró además su preocupación por que la política de infraestructuras y de comunicaciones en Andalucía haya tenido mucho que ver en los últimos años con la financiación europea, fondos que en este momento ya no están garantizados, según dijo, lo que unido a una financiación autonómica que podría no ser de lo más favorable para Andalucía y al hecho de que, en la comunidad, se dejaron de invertir para infraestructuras 5.800 millones de euros entre los años 2000-2006 dibuja un "escenario muy preocupante en la comunidad".

ÚLTIMO PUESTO

De otro lado, Arenas puso de manifiesto el hecho de que Andalucía ocupe "el último puesto" en el camino hacia la convergencia real, según el último informe de Funcas, cuando de lo que se trata, a su entender, es de que la comunidad pueda jugar algún día la 'champion' con comunidades como Cataluña o Madrid, la cual "genera el 60 por ciento de todo el empleo" que se crea en España.

Arenas también insistió en su discurso de que los andaluces deben tener un debate propio sobre sus problemas, de manera que las elecciones autonómicas no deberían coincidir de nuevo con las generales.