MADRID 28 Mar. (EUROPA PRESS) -
El portavoz de la asociación de jueces Francisco de Vitoria, Juan Pedro Quintana, recordó hoy que la "condena del terrorismo" y la "asunción de las vías democráticas" para lograr fines políticos no son un "elemento decisivo" para considerar si una formación puede ser inscrita como partido político sino que es necesario estudiar una serie de elementos objetivos para concluir si existe o no voluntad de continuar con "la actividad de una organización política ilegalizada o disuelta".
Tras conocerse que en los estatutos de la formación Abertzale Sozialisten Batasuna (ASB) se apuesta por 'utilizar exclusivamente las vías democráticas', recalcó que este tipo de afirmaciones son "un elemento de juicio más a considerar" en su valoración pero no el único. "Cabe la posibilidad en teoría de que una organización manifieste eso y actúe de forma contraria a esa manifestación", apuntó.
En declaraciones a Europa Press Televisión, explicó que en estos casos se atiende a hechos "puramente objetivos" como es la estructura, la organización, el funcionamiento, las personas que lo dirigen o representan, la financiación, los medios materiales de que disponen o cualquier otra circunstancia que permita concluir si pretenden "suceder o continuar con la actividad de un partido político disuelto".
Asimismo, Quintana rehusó pronunciarse sobre el caso concreto de la formación ASB pero defendió que se tomará la decisión correspondiente que en función de los "medios de prueba" de los que disponga el ministerio del Interior.
En este sentido, aseguró que el ministerio del Interior está cumpliendo con su "obligación" al ordenar a la Fiscalía que inicie actuaciones sobre ASB y subrayó que "si detecta o tiene la creencia de que existen indicios racionales" para considerar que esta formación política pretende continuar con "la actividad de una formación ilegalizada y disuelta, debe ponerlo en conocimiento del Ministerio Fiscal o acudir a la Sala 61 del Tribunal Supremo".
Así, Quintana concluyó que son ambos organismos los que deben pronunciarse sobre "la procedencia o no de esa consideración" y, por tanto, sobre "si cabe o no cabe la inscripción de ese partido político".
Respecto a los últimos cambios en la composición de la sala 61 del Tribunal Supremo, reconoció que hay "cierta polémica" por las últimas incorporaciones pero se mostró convencido de que todos estos conflictos se resolverán y la sala "actuará con total objetividad en este caso y su composición será sin duda legal".