BILBAO, 15 Sep. (EUROPA PRESS) -
Los 24 atuneros españoles, en su mayoría vascos, que faenan en aguas del Índico, aguardarán a recibir noticias sobre las actuaciones que las autoridades estatales y europeas puedan adoptar para evitar el acoso de los piratas somalíes antes de decidir si abandonan la protesta en el puerto de Victoria (Seychelles) y vuelven a faenar. Según manifestaron, sus reclamaciones no pretenden "que nadie vaya pegando cañonazos a diestro y siniestro", sino que se les pueda ofrecer información "para faenar seguros".
Nada más conocerse el sábado el ataque con granadas por parte de piratas contra un atunero francés, que pudo huir sólo con daños materiales de un intento de secuestro, el resto de naves decidieron volverse a puerto para denunciar la inseguridad en la que desarrollan su trabajo. Este ataque se suma a otro episodio similar que tuvo por objetivo al atunero de Bermeo "Playa de Anzoras" llevado a cabo también la pasada semana
Según manifestaron a Europa Press desde uno de los atuneros de Bermeo (Vizcaya), que faena en la zona del Indico, las primeras noticias sobre posibles actuaciones en el área por parte de la UE han sido acogidas con esperanza por los tripulantes de las embarcaciones que aguardan fondeados. "Que esa gente (los piratas) sepa que hay vigilancia, servirá para algo", dijeron.
Los pescadores se mantienen a la expectativa, algunos ya en puerto -una decena de ellos- y otros de regreso en sus embarcaciones. Se espera que para mañana por la mañana queden ya fondeados los 24 atuneros españoles, los ocho barcos de soporte para estas naves y los 18 atuneros franceses que se encontraban faenando. "El puerto está prácticamente saturado y la bahía empieza ya a estar también notablemente abigarrada", aseguraron.
Los mismos medios señalaron que lo que desean son medidas preventivas y de vigilancia en el área de pesca que les pueda garantizar su integridad física. "No pedimos que nadie que vaya pegando cañonazos a diestro y siniestro, sino que se nos dé un poco de información para saber en qué zonas podemos faenar seguros", dijeron.
En su opinión, la "medida óptima" es disponer de "algún tipo de avión o helicóptero" que "pueda dar un aviso en caso de que haya algún viso de ataque". "Si, por añadidura, se envían unas naves de apoyo en la zona, mejor que mejor", añadieron.
Los atuneros admitieron que la costa somalí es "una zona enorme", por lo que resulta "complicadísimo" controlarla "desde el principio hasta el final". "Pero -manifestaron- tampoco pedimos gran cosa, sólo un mínimo de seguridad".
"CON BIEN POCO"
Además, aclararon que se conforman "con bien poco" y que, en cuanto se decida "que se va a enviar algo, que nos dan una fecha aproximada, intentaríamos ir haciendo campaña a otras zonas esperando a que llegaran hasta el área de los últimos avistamientos e incidentes". "Una vez que estuviesen aquí, intentaríamos acercarnos a esa zona, porque es precisamente donde se producen más capturas en estas fechas", señalaron.
De hecho, calcularon que la parada "preventiva" que protagonizan los atuneros puede llegar a afectar "en un 30 ó 40 por ciento de todas las capturas del año", ya que ahora es cuando se pesca "el grueso" de túnidos del año.
Según explicaron, su "último recurso" es esperar que "toda esta migración de atuneros" tenga "alguna repercusión mediática" que haga "ejecutar" las medidas a las instituciones, y "no sólo decir sí".