La Audiencia de Málaga deja en suspenso la indemnización a los padres del ciclista Ochoa, atropellado en 2001

Actualizado: martes, 6 febrero 2007 13:30

MALAGA, 6 Feb. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia Provincial de Málaga ha decidido dejar en suspenso la indemnización concedida a los padres del ciclista Ricardo Ochoa, que murió atropellado en 2001, para que la cuantía se resuelva en ejecución de sentencia. Así, se revoca parcialmente el fallo de la resolución dictada por el Juzgado de lo Penal número 8 de la capital, al estimarse en parte el recurso interpuesto por la aseguradora AXA Aurora Ibérica.

Asimismo, la sentencia de la Sección Primera de la Audiencia, a la que tuvo acceso Europa Press, confirma la multa de 1.800 euros por dos faltas por imprudencia leve, impuesta al acusado Sebastián Fernández; y desestima los recursos de apelación presentados por la Asociación de Ciclistas Profesionales y por la familia del fallecido y el hermano de éste, que resultó herido de gravedad.

La Sala señala que la cantidad que resultaría de la aplicación de los baremos correspondientes es inferior a la concedida, que fue de 252.856 euros, y precisa que se desconoce la existencia de otras circunstancias que la jueza pudiera haber apreciado para conceder dicha cantidad, por lo que estima que existe "falta de concreción o motivación" en este sentido en la sentencia recurrida.

Por lo demás, no cree arbitraria la resolución y entiende que la imprudencia no puede calificarse como grave, aunque "sí lo fuera el resultado", al apuntar que no se pudo determinar la velocidad del vehículo y que el acusado no había ingerido bebidas alcohólicas ni tampoco realizó ninguna llamada por el móvil.

Además, el Tribunal indica que quedó acreditado, tal y como recoge la sentencia recurrida, que el coche estaba asegurado por AXA, que fue condenada como responsable solidaria y directa; sin que se pudiera determinar que el acusado supiera la falta de vigencia de la póliza.

El juzgado condenó al acusado a dos meses de multa y a la privación del carnet por un año. Además de la indemnización a los padres, ahora sin determinar, la sentencia estimaba el pago al hermano del fallecido, Javier Ochoa, de más de 1,3 millones de euros por la asistencia hospitalaria, las secuelas, los daños morales, la incapacidad permanente y los gastos médicos.

Los hechos sucedieron el 15 de febrero de 2001 cuando el acusado circulaba por la carretera A-357 en dirección Málaga y a consecuencia de una leve distracción invadió parcialmente el arcén derecho de la vía, "sin que conste que excediera el límite de velocidad", atropellando a los ciclistas. Mientras que Ricardo falleció, Javier sufrió lesiones graves, que le produjeron incapacidad permanente absoluta.