BARCELONA 19 Nov. (EUROPA PRESS) -
Técnicos del Departamento de Disciplina Urbanística del Ayuntamiento de Badalona (Barcelona), acompañados de agentes de la Guardia Urbana, precintaron este martes una iglesia pentecostal y un bar que operaban sin licencia y provocaban molestias a los vecinos.
Según un comunicado de este miércoles, la iglesia --situada en el barrio de Artigues-- no tenía permiso para actuar como centro de culto, por lo que se llevó a cabo el precinto.
En Llefià, se precintó un bar situado en la calle Pérez Galdós y que, además de provocar molestias a los vecinos, tenía abierto un expediente disciplinario desde 2013 por abrir sin licencia.