Blanco admite que las encuestas obligan al PSOE a hacer "un esfuerzo adicional", pero no está "especialmente preocupado

Actualizado: miércoles, 24 marzo 2010 17:00

Ve a Zapatero "con ambición de futuro" y cree que los nacionalistas están mostrando más sentido de Estado que el PP

MADRID, 24 Mar. (EUROPA PRESS) -

El ministro de Fomento y vicesecretario general del PSOE, José Blanco, es "consciente" de que las encuestas negativas obligarán a los socialistas a hacer un "esfuerzo adicional" pero asegura no estar "especialmente preocupado" por los sondeos.

"Queda mucho tiempo para los procesos electorales y, en todo caso, hemos tenido sondeos más adversos en otros momentos y, después, hemos ganado las elecciones", sostiene Blanco en una entrevista que publicará mañana 'El Socialista' y a la que ha tenido acceso Europa Press. "No estoy especialmente preocupado aunque sí soy consciente de que tenemos que hacer un esfuerzo adicional", reconoce el ministro.

En concreto, el 'número dos' del PSOE opina que los socialistas deben esforzarse "todos los días para ser merecedores de la confianza de los ciudadanos" y confía en que así será en las próximas generales. "Esperamos poder volver a ganarlas en el 2012", asevera.

Y respecto a si es posible que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, no sea el candidato socialista para entonces, Blanco responde que el presidente "ahora mismo está concentrado en dar la mejor respuesta para resolver el mayor problema que tiene", que es volver a crear empleo, y que "todo lo demás son especulaciones sin fundamento". "Veo al presidente del Gobierno con mucha vitalidad, muchas ganas y con ambición de futuro", apostilla.

Además, a pesar de las encuestas, se declara confiado en que cuando llegue "la hora de la verdad" los ciudadanos valorarán "no sólo lo que ha hecho el Gobierno" sino también "la actitud de la oposición y su comportamiento".

De hecho, Blanco acusa al PP de ser el "único" partido que "trata de poner todos los obstáculos" para que no sea posible acordar las medidas económicas propuestas por el Gobierno para acelerar la recuperación económica y llega a decir que está apreciando más "sentido de Estado" en partidos nacionalistas que en el principal grupo de la oposición.

Es más, defiende que ese obstruccionismo es una "decisión estratégica" de los 'populares', a los que acusa de querer "gobernar a caballo de la crisis". Por ese motivo, agrega, el PP no presenta "ni una sola propuesta" que pueda suponer "sacrificio alguno de los ciudadanos" y por eso "pone todo tipo de excusas" para evitar "buscar puntos de encuentro". "De verdad, los hay, y serían muy beneficiosos para el interés general", apostilla el ministro.

Con todo, se declara convencido de que habrá "conclusiones positivas" en los tres procesos negociadores que tiene abiertos el Gobierno: la 'comisión Zurbano' que ultima medidas como la rebaja del IVA para las obras de rehabilitación, la reforma de las pensiones el Pacto de Toledo y la reforma laboral con sindicatos y patronal.

"Estoy convencido que sobre los tres asuntos habrá amplios acuerdos que puede que no sean totales pero, en todo caso, hemos constatado que es más lo que nos une que las diferencias que tenemos, que lo que nos separa", argumenta Blanco.

"NO SERÍA GRAVE QUE NO HUBIESE ACUERDO"

No obstante, el dirigente socialista avisa de que, en lo relativo a la 'comisión Zurbano', "no sería grave que no hubiese acuerdo", aunque insiste en que "el pacto sería lo mejor para el bien del país".

Según dice, el Gobierno está dispuesto a tomar decisiones, pero prefiere que vengan "avaladas por un amplio consenso" para que generen confianza y así aceleren la recuperación económica. Un acuerdo político, insiste, sería "un mensaje claro y positivo para los mercados internacionales, los mercados nacionales, para los consumidores, para los pequeños y medianos empresarios, para los autónomos".

Cuando faltan pocos días para que llegue el ecuador de la legislatura, el titular de Fomento reconoce que "la lucha contra la crisis lo ha absorbido todo" pero sostiene que el Ejecutivo ha sabido responder y que, aunque la crisis está "afectando a muchas personas", "podría haber afectado a muchas más si el Estado no hubiese respondido".

Además, Blanco hace un "balance positivo" de su primer año al frente del Ministerio de Fomento, y subraya especialmente que en todos los aspectos ha "apostado por la concertación", porque "por encima de las miras partidistas han de estar los intereses de los ciudadanos".

Eso sí, tacha de "maldad" las palabras de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, cuando dijo que él sería un buen jefe de la oposición, y dejó claro que él quiere que el "jefe de la oposición, presente y futura, siga siendo Mariano Rajoy".

DESEA QUE NO CAMBIE EL LÍDER DEL PP

"Incluso deseo que no lo cambien, al contrario de lo que ellos nos piden a nosotros", agrega aludiendo a la petición que Rajoy hizo al Grupo Parlamentario Socialista, que retirasen su confianza en Zapatero.

Blanco deja claro que, a su juicio, las elecciones no se ganan dependiendo de quién esté al frente de la oposición, sino en función de que el "proyecto" de cada uno logre la confianza de los ciudadanos pero insiste en que "los ciudadanos votan por las expectativas de futuro y Mariano Rajoy es todo menos una expectativa estimulante de futuro".

Sin embargo, no comparte enteramente la tesis de que las elecciones no se ganan, sino que las pierde el Gobierno de turno, y replica que "las elecciones se ganan y se pierden" y subraya que el PSOE espera "poder volver a ganarlas en el año 2012".

Por último, se declara "totalmente satisfecho" con la transición realizada en el PSOE andaluz y argumenta que "Pepe Griñán y el equipo que ha conformado son una garantía de éxito para dar continuidad a un proyecto transformador de Andalucía".