No ve comparables los casos Faisán y Gürtel pero advierte de que Camps "ha puesto el listón para otros" al anteponer los intereses colectivos
SAN LORENZO DE EL ESCORIAL, 21 Jul. (EUROPA PRESS) -
El diputado del PP en el Congreso Vicente Martínez-Pujalte ha señalado este jueves que la dimisión del presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps, ha sido la mejor decisión tanto para él, desde una perspectiva personal, como para el partido, y, en este sentido, ha asegurado que, "si todo sale bien" en el juicio por cohecho impropio, "todo el mundo tendrá, desde luego, un sitio muy claro en el proyecto" de futuro de los 'populares.
"Creo que se necesitan gobiernos muy estables y, en mitad de esta situación, lo que ha hecho el señor Camps es lo mejor para todos: para él, para el PP y también para los valencianos", ha remarcado durante su paso por los Cursos de Verano del El Escorial, organizados por la Universidad Complutense de Madrid, en los que ha intervenido en la conferencia sobre 'La financiación de las Administraciones Públicas Españolas y la crisis económica'.
De esta manera, Martínez-Pujalte, que ha evitado pronunciarse sobre la inocencia de Camps, ha señalado que el primer sorprendido en caso de que el expresidente valenciano fuera declarado culpable sería él y, en este sentido, ha recordado que, en cualquier caso, Camps cuenta con la aprobación de sus ciudadanos en las pasadas elecciones autonómicas, donde ganó "por goleada por una mayoría absoluta amplísima".
"Creo que el tema del señor Camps lo que ha hecho es dejar que nos ocupemos de lo que nos tenemos que ocupar y luego probablemente, si sale todo bien, si sale todo como yo espero que salga, todo el mundo, desde luego, tendrá un sitio muy claro en el proyecto", ha dicho, en relación a la posibilidad de que el exdirigente haya sido obligado a dejar su puesto en consideración del perjuicio que pudiera provocar en la imagen del partido de cara a unas elecciones generales.
Asimismo, en contra de los defendido por otros integrantes de las filas 'populares', Mártínez-Pujalte ha incidido en que no ve comparable los caso Faisán y Gürtel, ni las situaciones de Francisco Camps y Alfredo Pérez Rubalcaba, ya que ha considerado que la dimisión del primero obedece más a una responsabilidad personal, mientras que las cuestiones que se relacionan con el segundo "no son parecidas ni tienen nada que ver".
No obstante, en este sentido, sí que ha advertido de que "el listón puesto por el señor Camps a la hora de anteponer los intereses colectivos a los suyos, marca una manera de actuar que puede ser aplicable a personas que están en otro tipo de investigaciones judiciales", aunque "no porque las investigaciones judiciales sean de los mismos temas".
Concretamente, ha llamado la atención sobre el caso de unos de los imputados en el caso Faisán, Victor García Hidalgo, "que está incurso en el caso, es un político y también es el secretario de Organización del PSOE en Álava", puesto que en su caso, el político vasco sí que "está inmerso en una acusación de colaboración con banda armada y no ha presentado ninguna dimisión".
"Lo que pasó fue que en ese momento el PSOE, encabezado por José Luis Rodríguez Zapatero, estaba en el llamado 'proceso de paz', en el buen rollo para llevar a cabo el proceso de paz, y en ese contexto se aborta una operación policial para favorecer ese proceso de paz, que es lo que en mi opinión está mal. Saltarse el Estado de Derecho por nada. Nunca el fin justifica los medios", ha argumentado, al tiempo que ha remarcado que, de todas formas, "los casos no son ni similares ni iguales".
HABLAR DE LAS CORBATAS "ES UNA COMPLETA INUTILIDAD"
Por otro lado, preguntado por la polémica genera en el Congreso en relación a la obligatoriedad de usar corbata, el político del PP ha considerado una "completa inutilidad" discutir sobre el uso de la misma, aunque ha incidido en que "se puede ir elegante y adecuadamente vestido sin corbata en el Parlamento". "Lo que tienes que conservar es una cierta compostura porque se le está exigiendo también a los que trabajan" en la Cámara Baja.
A su juicio, "si se convierte el debate político" en una dicotomía sobre las virtudes de llevar corbata o no hacerlo, "se estará trivializando de tal manera la actividad política que podría llegar a desencantar a los ciudadanos".
