Admite que el 9N se puso de manifiesto "que a veces cuando el Constitucional dice algo en la vida real no se aplica"
MADRID, 9 Sep. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha subrayado este miércoles que "el Ejército español es democrático y está al servicio de los ciudadanos", como ha demostrado en las décadas de democracia, y está dirigido por el Gobierno.
Catalá se ha limitado a decir esas palabras, en una entrevista en Onda Cero recogida por Europa Press, preguntado sobre si el Ejército debería tener algún papel en caso de una declaración unilateral de independencia por parte del Parlamento de Cataluña.
En todo caso, el ministro se ha mostrado convencido "de que eso no va a pasar", por el resultado electoral --opinando así que los independentistas no lograrán mayoría-- y porque eso no está dentro de las competencias del Parlamento catalán, y los responsables públicos "no deben, no hacen nada al margen de sus competencias".
Pero si eso, pasase, ha dicho, el Gobierno cumpliría su obligación de defender la Constitución, y eso supondría impugnar la declaración ante el Tribunal Constitucional "para que la declare inconstitucional y de entrada suspenda esa actividad". "Pero yo creo que no vamos a llegar a ese punto", ha dicho tajante.
Catalá ha defendido la reforma del Tribunal Constitucional para que el órgano pueda llegar a sancionar a quienes incumplen sus resoluciones y ha admitido que desde el 9 de noviembre de 2014 ha habido "una serie de medidas que quizá han exacerbado la opinión de que no se estaban cumpliendo las resoluciones del TC", y de hecho hubo una querella de la Fiscalía General del Estado.
"Lo cierto es que el 9N hubo urnas y colegios electorales y se puso de manifiesto quizá con más virulencia que a veces cuando el Tribunal Constitucional dice algo en la vida real no se aplica", ha reconocido. No obstante, ha insistido en que la reforma "no va contra Cataluña, ni contra Artur Mas", sino que es "una medida para darle al Constitucional más fortaleza".
Catalá ha querido dejar claro que la mayoría de las decisiones del TC sí se cumplen --cuando se declara inconstitucional una ley ésta "desaparece y no tiene efectos--. En caso de incumplimiento, ha reconocido que ya existe la vía de la Justicia ordinaria pero también ve "razonable" que se dote al Constitucional de "ejecutividad" para hacer cumplir sus resoluciones.
"NO ES NADA EXÓTICO"
El ministro ha recalcado que la falta de esa pieza de ejecutividad en el tribunal español ha sido analizado por la doctrina desde hace tiempo. "No es nada exótico, es lo que hacen los tribunales", ha apuntado.
Además, ha dejado claro que reformar el tribunal a través de una proposición de ley presentada por el Grupo Popular es un procedimiento válido y la reforma tendrá "toda la calidad democrática", y ha sentenciado que quien diga lo contrario "desconoce las reglas de la democracia".
