MADRID 23 Sep. (EUROPA PRESS) -
El coordinador general y diputado de Izquierda Unida (IU), Gaspar Llamazares, consideró hoy que la futura elección del magistrado Carlos Dívar como presidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) "consagra, aún más si cabe, la política bipartidista de reparto del máximo órgano de gobierno de los jueces, en detrimento del funcionamiento normal, efectivo e independiente del mismo".
A juicio de Llamazares, el hecho de que José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy tuvieran "diseñada en secreto con nombres y apellidos desde antes del verano la cúpula del CGPJ, presidencia y vicepresidencia incluida, supone un ataque directo no sólo a la autonomía de este órgano fundamental de nuestro Estado de derecho, sino también a la credibilidad de la actividad legislativa del Parlamento como lugar de verificación de la idoneidad y capacitación, además de elección de los vocales".
En un comunicado, afirmó que es "gravemente preocupante la falta de autonomía del Consejo, que queda establecida para mucho más allá de lo que dure la presente legislatura tras la aplicación práctica hasta el límite del 'tuya-mía' acordado por PSOE y PP, con algún maquillaje y guiño nacionalista para salvar las apariencias". "El respetuoso silencio de CiU y PNV en todo este proceso muestra la asunción de un papel de mudos convidados de piedra que va en detrimento del efectivo funcionamiento del sistema", puntualizó.
En su opinión, deberían haber sido los 20 vocales recientemente elegidos, como está establecido, "quienes eligieran a sus dos máximos representantes, presidente y vicepresidente, sin intervención ni directrices políticas de los partidos", y agregó que el CGPJ ha pasado así, por el momento, de "ser correa de transmisión de la confrontación partidista asumida por el anterior, a estar sometido al mayor control político en su formación en toda la historia democrática".
Llamazares aseguró que "sin entrar a valorar el perfil ideológico del magistrado que ocupará la presidencia, sí es evidente que Zapatero ha logrado resolver la 'cuadratura del círculo' con tan directísima implicación en su nombramiento. Tras dejar sin representación profesional en el CGPJ a cerca del 50 por ciento de los jueces españoles -aquellos que no pertenecen a ninguna asociación profesional-, solivianta ahora a los magistrados progresista a los que pretendía satisfacer y, eso sí, logra colmar las expectativas de la derecha política y judicial".
"Desde IU sólo esperamos que el PSOE no se vea obligado nunca a pedir ayuda por lo que le depare a medio y largo plazo esta elección cocinada en solitario por su líder Rodríguez Zapatero, con la única colaboración de la derecha representada por Rajoy", sentenció.