Confebask dice que no tiene notificación de nuevas cartas de extorsión a empresarios pero que "sigue ahí y no ha parado"

BILBAO, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la Confederación Empresarial Vasca (Confebask), Miguel Lazpiur, afirmó hoy que las cartas de extorsión de ETA a empresarios "llegan de una en una" y que, aunque ahora mismo no tiene notificación de que haya habido una nueva remesa de dichas cartas, aseguró que "sigue ahí y no ha parado".

En una entrevista a Euskadi Irratia, recogida por Europa Press, Lazpiur indicó que la situación que se vive en estos momentos con ETA activa "no es para bien" y deseó que, "si se pacificara, sería mejor para todos", aunque lamentó que "las cosas están como están y tendremos que salir adelante".

El presidente de Confebask aseguró que la organización empresarial vasca está "en contra" de la violencia y que, aunque aceptan que surjan nuevas organizaciones, en referencia a la Asociación de Empresarios Vascos, que acusó a Confebask de "tibieza" ante ETA, "lo que nosotros no podemos aceptar es que digan que hayamos sido tibios contra la violencia".

"Eso no lo podemos aceptar. Es una falta de respeto, porque en Euskadi no ha habido ningún grupo o colectivo que haya sufrido más que los empresarios. Hemos tenido de todo, muertos, atentados, amenazas, y siempre le hemos hecho frente y creo que decir eso es una gran falta de responsabilidad", destacó.

Por otro lado, Lazpiur dijo que Confebask "no va a tomar parte" en el debate sobre la consulta planteada por el lehendakari, Juan José Ibarretxe, porque "intentamos no entrar en política", ya que, según explicó, "en nuestra organización hay opiniones de muchos tipos y respetamos todas, por lo que no podemos dar opinión política".

En este sentido, indicó que los objetivos de la patronal vasca "no son políticos, sino empresariales", y destacó que "respetamos a todos y nosotros tenemos que hacer nuestro trabajo, que es empresarial y económico".

TAV

Por otro lado, el presidente de Confebask aseguró que no tiene constancia de las amenazas de ETA a empresas colaboradoras en la construcción del Tren de Alta Velocidad aunque reconoció que "quizás puede haberlas".

Así, afirmó que la violencia "es mala para todas las actividades" y, sobre todo, "para sacar adelante la economía", al mismo tiempo que subrayó la importancia del proyecto del Tren de Alta Velocidad para Euskadi "porque es básico para su futuro".

"Creemos que este proyecto es básico para el bien de Euskadi y para su futuro, y es obligatorio para comunicar y acercar Europa, España y Euskadi. Hoy en día, esa cercanía es obligatoria para la actividad económica. Yo diría que este proyecto es para el bien de Euskadi y que la mayoría lo acepta. No se puede utilizar la violencia y la amenaza para echar atrás este proyecto", manifestó.