El Congreso deja para septiembre el primer debate del Estatuto castellanomanchego, que podría no completarse

Actualizado: miércoles, 20 junio 2007 20:41

MADRID, 20 Jun. (EUROPA PRESS) -

El Congreso dejará para el mes de septiembre el debate de totalidad de la reforma estatutaria de Castilla-La Mancha, con lo que su tramitación por las Cortes Generales corre riesgo de no completarse antes de la disolución de las Cámaras, se informó a Europa Press en fuentes parlamentarias.

Los desacuerdos entre el PSOE y el PP en torno al estatuto canario, que se mantiene encallado en el Congreso desde el debate de totalidad de febrero, está afectando a las otras dos reformas estatutarias registradas en la Cámara, las de Castilla y León y Castilla-la Mancha, pese a que ambas cuentan con el consenso de las dos formaciones mayoritarias.

Semana a semana, la Mesa del Congreso viene prorrogando los plazos de enmiendas a las reformas estatutarias de Canarias y Castilla y León, y la última ampliación llega hasta el próximo día 26, con muchas posibilidades de que se vuelva a extender directamente hasta septiembre, dado que julio y agosto no son meses de actividad parlamentaria.

Detrás de ellos está la reforma del Estatuto de Castilla-La Mancha, que aún no ha pasado por el Pleno del Congreso para el debate de la toma en consideración, primer trámite de toda proposición de ley.

SOLO CUATRO MESES, Y ADEMÁS LOS PGE.

Dado que se aproxima el fin del presente periodo ordinario de sesiones, los grupos parlamentarios ya han decidido que pasarán este debate de totalidad de la reforma castellanomanchega al mes de septiembre, tras lo cual empezarán a correr sus plazos de enmiendas, nunca inferiores a cinco semanas.

Así las cosas, y como quiera que los grupos parlamentarios no piensan alterar el orden de tramitación de los Estatutos, empieza a resultar complicado que dé tiempo a completarse la aprobación de las tres reformas pendientes en los apenas cuatro meses hábiles que quedan de actividad parlamentaria, un periodo que además está marcado por la tramitación de los Presupuestos Generales del Estado.

En cualquier caso, la disolución de las Cortes Generales por la convocatoria de las próximas elecciones generales no obligará a iniciar todo el proceso en las comunidades autónomas de origen, sino que las reformas pendientes quedarán en el Congreso a la espera de que las retome la Cámara renovada.