Las Cortes aragonesas rechazan una iniciativa del PP que pedía la construcción de una autopista entre Zaragoza y Madrid

ZARAGOZA, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -

El pleno de las Cortes de Aragón rechazó hoy una proposición no de ley presentada por el grupo parlamentario del Partido Popular que pedía la construcción de una autopista entre Zaragoza y Madrid. La iniciativa contó con el apoyo del PP y el rechazo de los grupos del Partido Socialista (PSOE) y Partido Aragonés (PAR), mientras que Chunta Aragonesista (CHA) e Izquierda Unida (IU) se abstuvieron.

El portavoz del PP, Fernando Martín, puso de manifiesto los problemas existentes en la actual autovía A-2, que une Zaragoza con la capital de España, con "siete puntos negros" que generan "numerosas víctimas". Además, hay "muchos baches y problemas" y puso como ejemplo el que él mismo sufrió tras necesitar 30 minutos para realizar un kilómetro de la citada vía.

Por eso, abogó por construir una autopista, que, aseguró, es "una reclamación a voz cantada de todos los agentes económicos" de la zona ya que las comunicaciones "son imprescindibles para el desarrollo" de un territorio.

El portavoz del PSOE, Enrique Villarroya, explicó su voto en contra el recordar que existe un plan de acondicionamiento de la autovía A-2, que supone la inversión de 1.547 millones de euros en 220 kilómetros, lo que significa "prácticamente una ejecución nueva", garantizando "la calidad y capacidad".

"Una vez más el Ministerio de Fomento cumple con la renovación y con una inversión muy importante para que esta autovía goce con garantías de seguridad y con un coste cero para el usuario", argumentó el diputado.

El portavoz del PAR, Miguel Ferrer, mostró su "preocupación" por el estado de esta infraestructura "que hay que remodelar porque no responde a las exigencias técnicas de las nuevas autovías", pero estimó que la iniciativa era innecesaria porque las obras para su adecuación se adjudicaron el pasado mes de octubre y van a suponer su "modernización, reposición y gran reparación".

El portavoz de CHA, Bizén Fuster, calificó la propuesta como "bienintencionada" porque "la autovía está en mal estado, tiene problemas de trazado y de peralte en las curvas", pero consideró que "no encaja fácilmente con el modo en que en estos momentos se puede acometer una obra pública en el Estado español", puesto que hay un plan nacional de infraestructuras y "las obras que no están ahí no existe para el gobierno".

Por otra parte, abogó por mejorar la actual autovía --haciendo algún tramo nuevo--, mas que por construir una nueva autopista.

El portavoz de IU, Adolfo Barrena, reconoció que la actual A-2, "está obsoleta y tiene puntos negros que ponen en riesgo la vida de quienes la utilizan", pero no votó a favor de hacer una autopista "porque no creemos que ese sea el modelo".