BRUSELAS 21 Jun. (EUROPA PRESS) -
La cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea que busca llegar a un acuerdo sobre el nuevo tratado reformado de la UE comenzó poco después de las 17.30 horas en la sede del Consejo Europeo, donde la anfitriona del encuentro y canciller alemana, Angela Merkel, iba recibiendo a sus colegas.
A su llegada al edificio 'Justus Lipsius', Merkel garantizó que tendrá "muy en cuenta las preocupaciones de todos los países" en las negociaciones que tendrán lugar entre hoy y mañana y que deberán contar con la necesaria unanimidad de los Veintisiete.
La sesión de hoy se iniciará con una sesión del Consejo a nivel de jefes de Estado y de Gobierno para aprobar la entrada de Chipre y Malta en el euro el 1 de enero de 2008. A esta sesión asistirá el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet.
A las 18:00 horas tendrá lugar la tradicional foto de familia, a la que seguirá la reunión de los líderes europeos con el presidente de la Eurocámara, Hans-Gert Poettering. Durante la cena, que comenzará a las 19:00 horas, los jefes de Estado y de Gobierno tendrán una primera discusión sobre la revisión del Tratado, a la que asistirá el alto representante de la UE para la Política Exterior, Javier Solana.
En paralelo, los ministros de Asuntos Exteriores de los Veintisiete discutirán sobre los Balcanes Occidentales, sobre las relaciones UE-África y UE-Brasil, y sobre cuestiones generales sobre las misiones actuales y futuras de la UE.
El debate sobre el nuevo Tratado simplificado continuará durante la jornada del viernes y según fuentes del Consejo, es intención de Merkel organizar los trabajos en torno a reuniones estrictamente bilaterales -que tendrán lugar antes y después del almuerzo-- y convocar el plenario sólo si tiene garantías de que hay bases para un acuerdo.
Las mismas fuentes hablan de la determinación de la canciller por lograr el consenso de sus colegas para salir del atasco institucional en el que se sumió la UE hace dos años. En las últimas semanas, además, nuevas exigencias puestas encima de la mesa por algunos países, especialmemte Polonia, Reino Unido, República checa y Países Bajos, han añadido más complicación a unas ya de por sí complejas y áridas negociaciones.
Más allá del método de negociación con el que espera alcanzar un acuerdo, Merkel declaró que los líderes tendrán que concentrarse en conseguir un consenso que espera "no sólo la gente en Europa, sino en todo el mundo". "Los ciudadanos de Europa esperan que nos concentremos en los asuntos que son realmente importantes", dijo.