BARCELONA, 29 Sep. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Generalitat, José Montilla, aseguró hoy que los presupuestos de la Generalitat para 2010 tendrán como máxima prioridad paliar las consecuencias de la crisis e impulsar la recuperación económica, por lo que se basarán en la austeridad, las políticas de mejora de la competitividad y la atención "hasta el límite posible" de las necesidades económicas y sociales derivadas de la crisis.
Durante su discurso en el Debate de Política General, subrayó que el Govern tiene el deber de ayudar a los que lo están pasando peor debido a la crisis, atender a las familias y facilitar el retorno al mundo del trabajo a los parados, algo para lo cual anunció más recursos otorgados a los ayuntamientos y destinados a políticas sociales.
Según señaló, el Govern quiere que "el máximo de recursos movilizables y posibles de entre los destinados a políticas sociales" se vehiculen a través de los ayuntamientos, ya que --a su juicio-- los ayuntamientos son los que más duramente deben trabajar para ayudar a las familias afectadas por la crisis.
"Hasta ahora hemos hecho bandera del objetivo de que nadie quede al margen. Lo seguiremos haciendo llevando al límite nuestras posibilidades de déficit", añadió.
Aun así, insistió en que las ayudas a las personas y los sectores más perjudicados por la crisis deben tener un horizonte temporal limitado, por lo que cesarán a medida que vayan desapareciendo las circunstancias que los hacen necesarios. "No queremos consolidar un gasto que sólo se justifique en momentos de crisis. No queremos convertirnos en un país con una economía y una sociedad cada vez más dependiente de los recursos públicos", añadió.
Montilla aseguró también que los presupuestos estarán basados en la austeridad, que viene dada por la disminución de los recursos disponibles y que afectará al gasto corriente "no vinculado a la atención a las personas", afirmó.
Aseguró que, más allá de la austeridad dictada por la crisis, "sería una imprudencia actuar como si el país en general y los ingresos públicos vayan a volver a una nueva época de vacas gordas pasada la crisis". Por este motivo, instó a acostumbrarse a tener los recursos justos y evitar gastos no estrictamente necesarios.
El presidente apuntó como otra gran priodidad de Govern compatibilizar las políticas destinadas a aminorar los efectos sociales de la crisis con la mejora de la competitividad. A su juicio, sería una "insensatez" dar marcha atrás en las políticas impulsadas en este sentido y para transformar el modelo productivo.
Anunció que mantendrán el esfuerzo previsto en esta línea, ampliarán los recursos destinados a la formación e impulsarán nuevas medidas de apoyo a autónomos y emprendedores. "Queremos asociar los recursos obtenidos con la nueva financiación a reimpulsar nuestra economía", con una mejora del capital humano y del modelo productivo, añadió.
A pesar de todo, Montilla ve a Catalunya preparada para afrontar y superar los retos que la "explosión y la profundidad de la crisis han puesto en evidencia de manera inaplazable", gracias en parte a la determinación con la que ha actuado la Generalitat.
"Hemos sabido liderar la reacción colectiva de la sociedad catalana", dijo, y recordó algunos logros del Govern en los últimos años, como los pactos nacionales para la Investigación e Innovación, el de Inmigración, y el de Infraestructuras; la Ley de Educación de Catalunya; y el Acuerdo de Medidas para el Empleo Juvenil.
