Declarado culpable el acusado de acuchillar 23 veces a su novia en Viladecans, a la que no podía acercarse

Actualizado: viernes, 24 abril 2009 21:44

BARCELONA, 24 Abr. (EUROPA PRESS) -

Un tribunal popular ha declarado culpable de asesinato con alevosía al hombre que fue juzgado esta semana en la Audiencia de Barcelona por apuñalar 23 veces a su pareja en el piso de ésta en Viladecans, pese a que tenía prohibido acercarse a menos de 500 metros de ella por haberla maltratado.

Los hechos ocurrieron sobre las 23 horas del 12 de diciembre de 2006, cuando el procesado, José Manuel G.S., estaba con la víctima y madre de su hijo, Montserrat B.A., en la vivienda de ésta, en la avenida de la Generalitat de la localidad, donde llegó tras consumir una gran cantidad de alcohol y cocaína, según explicó el acusado.

La fiscal, que pedía 23 años de cárcel, sostiene que José Manuel G.S. cogió un cuchillo de 33 centímetros de largo y apuñaló 23 veces a Montserrat B.A. en el torso, el abdomen, la espalda y los brazos, atravesando los pulmones, el hígado, el bazo y, finalmente, el corazón, una puñalada final que le causó la muerte.

"No lo recuerdo", se limitó a decir el procesado cuando la fiscal le preguntó por qué apuñaló a su pareja, por el número de puñaladas que asestó a la víctima y si ésta se defendió o le dijo algo. Sólo explicó que cuando empezó a apuñalarla estaba sentada en el sofá y que le arañó en la mano.

El acusado aseguró no recordar gran cosa de lo ocurrido a causa del consumo de alcohol y drogas, y sólo dijo que cogió un cuchillo de la mesa del comedor, donde estaban discutiendo porque él creía que ella le era infiel.

El hombre se cambió de ropa y se quedó en la casa hasta al día siguiente, cuando se marchó para seguir bebiendo alcohol en distintos bares, según relató el procesado. Sobre las 18.30 horas del día siguiente, el acusado le contó por teléfono a su hermano Rafael que debía irse "un tiempo" porque había matado a su novia y le pidió que le denunciara en comisaría.

ORDEN DE ALEJAMIENTO INÚTIL

Se da la circunstancia de que el 11 de marzo de ese mismo año, José Manuel G.S. pegó tres bofetones a Montserrat B.A. y la amenazó con un cuchillo durante una discusión en el piso de la avenida de la Generalitat, donde convivían. La mujer obtuvo una orden de alejamiento, pero el 22 de marzo él fue a buscar a la mujer y le dio dos tortazos.

Posteriormente, José Manuel G.S. acabó siendo condenado a un año de prisión por malos tratos y le prohibieron acercarse a menos de 500 metros de Montserrat B.A. No obstante, el acusado dijo que su abogado le aseguró que podía vivir con ella, por lo que convivían los fines de semana con el hijo de ambos.