MADRID 22 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil ha desarticulado a un grupo organizado de 20 personas que presuntamente asaltó 50 empresas de la Comunidad de Madrid, donde robaron gran cantidad de objetos y coches, gracias a que uno de los componentes inhabilitaba previamente las alarmas haciéndose pasar por un experto en seguridad, informó hoy la Benemérita.
La investigación policial comenzó en enero, tras un robo con fuerza en una empresa de Pinto. Días después, en el mismo municipio, los autores sustrajeron de un concesionario 12 automóviles, algunos de los cuales fueron empleados posteriormente en la comisión de diversos robos con fuerza.
Los agentes localizaban que en ambos lugares había acudido un día antes una persona que, tras identificarse como trabajador de la empresa de seguridad que gestionaba el sistema de alarma, había manipulado la misma, dejándola inhábil.
Contrastando este dato con varios comisarías, la Policía logró localizar 16 hechos delictivos cometidos bajo este sistema en distintas poblaciones, distribuidas a lo largo de toda la región. Así, a la banda se le imputan hechos delictivos en Pinto, Móstoles, Parla, Fuenlabrada, Aranjuez, Alcorcón, Leganés, Getafe, Mejorada, Las Rozas, Madrid, Ciempozuelos, Torrejón, Coslada y Boadilla del Monte.
Los detenidos se habían especializado en el robo de restaurantes de comida rápida los fines de semana, preferiblemente el domingo y a última hora, ya que previsiblemente la recaudación era más elevada. La Policía ha detectado un total de 25 hechos delictivos perpetrados contra este tipo de establecimientos a través de la inutilización de alarmas o con un butrón en la parte superior del local.
Las declaraciones de las víctimas y el visionado de las cámaras de seguridad de los establecimientos asaltados permitió identificar a parte del grupo. Así, descubrieron que tres o cuatro componentes se desplazaban al lugar elegido, y mientras que uno de ellos utilizaba su disfraz de técnico de seguridad, el resto vigilaba las inmediaciones, para huir rápidamente si observaban algo extraño.
Las vigilancias realizadas sobre el grupo principal, integrado por M.M.A., el cabecilla del grupo, y R.S.B., D.D.A., J.M.A. y A.F.A, destaparon la colaboración necesaria de otras personas, incluidos los miembros de su propia familia, tanto en labores de vigilancia, como en la venta de sustancias estupefacientes a pequeña escala y en el maquillaje de los vehículos robados.
La Policía realizó registros domiciliarios en Madrid, Valdemoro Colmenar de Oreja y Seseña, donde requisaron cuatro pistolas simuladas, 14 vehículos, muchos de gran cilindrada, tres motocicletas de gran cilindrada, más de una veintena de centralitas utilizadas para el robo de vehículos, 60.000 euros en efectivo, 140 gramos de cocaína de gran pureza, una gran cantidad de ordenadores portátiles, algunos pertenecientes a organismos oficiales, y efectos de perfumería valorados en más de un millón de euros.
En los ocho registros simultáneos la Guardia Civil detuvo a 20 personas, 14 hombres y 6 mujeres, con edades comprendidas entre los 20 y los 35 y años, la mayoría con antecedentes por hechos similares.
Los detenidos fueron puestos a disposición de la autoridad Judicial, quién decretó el ingreso en prisión de diez de los veinte detenidos. La operación sigue abierta para esclarecer posibles nuevos hechos delictivos.