Doscientas parejas habrían desembolsado hasta 56.000 euros por la 'mediación', incluida la falsificación de documentos
MADRID, 27 Oct. (EUROPA PRESS) -
La operación de la Policía contra una red que falsificaba documentos para la adopción ilegal de niños en Rusia ofrece un saldo provisional de seis detenidos, aunque sólo la jefa del grupo, Olga Zubakova, se encuentra en prisión por orden de un juez de Madrid. También fue puesto a disposición judicial, y más tarde quedó en libertad, Francisco de Asís Jorge Rojas Caballero, ex marido de Zubakova y del que la Policía sospecha que se dedicaba a 'blanquear' el dinero que la mujer obtenía del fraude, informaron a Europa Press fuentes de la investigación.
Otros dos hombres del círculo de Zubakova --que tiene nacionalidad española-- también han sido detenidos y puestos en libertad sin necesidad de pasar a disposición judicial. Se trata de la actual pareja de la mujer, Rafael B.L. y de otro hombre con algún tipo de vínculo personal con Zubakova, José Antonio T.T.
Alrededor de doscientas parejas contrataron los servicios de Zubakova, llegando a pagar hasta 56.000 euros, según han concluido las pesquisas policiales. Los gastos corrían a cargo de la organización, por lo que para calcular el montante neto obtenido por Zubakova habría que descontarlos. Hoy, el Ministerio del Interior informó de que la cifra abonada por algunas parejas era algo menor, llegando a rebajarse hasta los 48.000 euros.
La nómina de detenidos la completa una pareja de Córdoba (Manuel P.V. y Antonia O.M), arrestados el pasado miércoles tras aterrizar en el aeropuerto de Barajas, procedentes de Moscú, a donde habían viajado para adoptar a dos niños con documentos falsificados por Zubakova. La pareja reconoció ante los investigadores que eran conscientes de la ilicitud del procedimiento y la falsedad de los documentos que les habían sido suministrados.
El pasado mes de agosto, la Dirección General de Infancia y Familias de la Junta de Andalucía denunció en un Juzgado de Sevilla la presunta comisión de irregularidades en las adopciones internacionales por Vía Libre que se llevan a cabo en Rusia y las cuales son gestionadas para la Comunidad Autónoma de Andalucía desde esa Dirección General.
Según las gestiones posteriores realizadas por la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Policía, dichas irregularidades consistirían en falsificaciones de los documentos oficiales necesarios para tramitar la adopción de menores en Rusia. Unas falsificaciones que eran realizadas por Zubakova, la mediadora que se supone conoce los trámites necesarios para llevar a cabo las adopciones por este procedimiento, tanto en el país de origen como en el de destino de los menores.
La Policía Nacional solicitó la colaboración del Embajador y el Cónsul de España en Rusia, y de la Dirección de Infancia y Familias de la Consejería para la Igualdad y Bienestar Social de la Junta de Andalucía, para obtener las documentaciones emitidas por unos y recibidas por otros, a través de los 'mediadores' investigados, en el caso de la pareja cordobesa. Con estos documentos los agentes realizaron los cotejos pertinentes para determinar si desde la organización que ejercía como facilitadora se estaban cometiendo esas irregularidades.
Los investigadores comprobaron la existencia de falsedades y alteraciones en el certificado de idoneidad que debería haber sido emitido por la Dirección de Infancia y Familias y que fue presentado tanto ante las autoridades judiciales rusas para conseguir la adopción, como en el Consulado de España en Rusia para documentar seguidamente a los menores al objeto de que pudieran ser trasladados a España.
En el caso de la pareja arrestada, ésta pretendía adopatar a dos niños, pero la legislación española sólo lo permite si éstos son hermanos. En Rusia habían encontrado a una pareja que les pareció ideal, pero que presentaba un inconveniente: su parentesco era de primos hermanos. Al destaparse el caso, no les fue concedido el visado y tuvieron que regresar de Moscú. Existen en la actualidad dos procedimientos para cumplimentar la adopción internacional en Rusia. El primero sería a través de la Entidad Colaboradora en la Adopción Internacional que utiliza los recursos de las administraciones de los dos países implicados en la adopción. El otro sería por "Vía Libre", en el cual los padres adoptantes llevan a cabo los trámites de forma particular en ambos países conforme a la legalidad vigente, para de ese modo tratar de conseguir la adopción en el mínimo tiempo posible.
MEDIADORES DE LA ADOPCIÓN INTERNACIONAL.
En este segundo procedimiento aparece una figura asociada que es la del facilitador o mediador. Dicha figura es necesaria en la adopción internacional por el conocimiento de los trámites necesarios a llevar a cabo por vía libre, tanto en el país origen de los adoptantes como en el país origen de los adoptados.
Asimismo, y en el caso de Rusia, el facilitador es una figura fundamental por tener conocimiento de las dos lenguas, tanto escritas como habladas de los dos países en que se realizan los trámites. Las personas que llevan a cabo esta actividad suelen tener infraestructura en ambos países, en unos para localizar parejas que quieran adoptar y en el otro para que alguien les acompañe en los trámites administrativos y les sirvan como intérpretes.
Los ahora detenidos se amparaban en esta figura legal para realizar las gestiones pertinentes con el fin de agilizar o adecuar la idoneidad de las parejas adoptantes. Éstas gestionaban oficialmente toda la documentación a través de su respectiva Comunidad Autónoma. Cuando la documentación oficial estaba tramitada y tenían ya el número de expediente de adopción internacional con la Comunidad correspondiente, cotejaban si el certificado de idoneidad otorgado se puede ajustar con alguno de los niños que ya tienen localizados en "casas cuna" de Rusia y de los cuales tienen fotografías.
Una vez seleccionado el niño, los mediadores inician el proceso de falsificación para ajustar los certificados de idoneidad para que encajen con los menores elegidos. Al mismo tiempo, todos aquellos certificados que necesitan de un periodo de tiempo para ser solicitados o que entrañan cualquier problema, el mediador se encargaría de llevarlos a cabo mediante falsificación integral de la documentación.
