Dictan una orden de busca y detención del ex concejal marbellí del PA Carlos Fernández por el 'caso Malaya'

MALAGA, 4 Jul. (EUROPA PRESS) -

El ex concejal del Partido Andalucista de Marbella (Málaga) Carlos Fernández y el empresario granadino Carlos Sánchez tienen dictadas sendas órdenes de busca y detención por parte del Juzgado de Instrucción número 5 marbellí, que investiga la presunta trama de corrupción en el Ayuntamiento, en la denominada operación 'Malaya', según apuntaron a Europa Press fuentes cercanas al caso.

En este sentido, fuentes policiales confirmaron que el instructor del caso, Miguel Angel Torres, dictó una orden de detención y personación en el juzgado "posterior" al día en el que se produjeron las detenciones de los 30 nuevos imputados en el procedimiento, que ya comparecieron ante el juez la pasada semana tras ser arrestados.

Por contra, el abogado del ex edil, José Luis Ortega, aseguró que hasta ayer no le constaba la existencia de orden alguna de detención o busca y captura y mostró sus dudas de que el juez hubiera dictado dicha orden "precisamente porque cuando se le registra su casa, por teléfono da la autorización y pregunta si está detenido y le dice la justicia que no, que no es necesario que se presente".

Señaló en declaraciones a Europa Press que "sólo existe una sospecha de una connivencia para repartirse unos dividendos, unas dádivas o unos premios". Además, recordó que Fernández se personó en el juzgado a través del letrado "a expensas de ser llamado por la justicia".

Asimismo, Ortega insistió en que tampoco le consta ninguna citación para comparecer en el juzgado e insistió en que con el escrito que él mismo presentó "se puso a disposición de la justicia para colaborar con ella". Mientras que el letrado señaló que su cliente se encuentra en su casa, fuentes de la investigación indicaron que no es así.

Agentes de la Policía Nacional registraron el pasado martes, dentro de la segunda fase de la denominada operación 'Malaya', la vivienda del ex edil andalucista, situada en la urbanización Cabo Pino, actuación en la que los investigadores se llevaron la torre del ordenador.