BILBAO, 31 Oct. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de LAB, Rafa Díez Usabiaga aseguró hoy que la decisión de abrir juicio oral contra el lehendakari, Juan José Ibarretxe, los dirigentes del PSE-EE Patxi López y Rodolfo Ares, y los miembros de Batasuna que se reunieron con ellos en 2006 y 2007, es el "desenlace a una intervención judicial que ha tenido como referencia fundamental una Ley de Partidos que criminaliza ideas políticas".
En su opinión, esta norma "contamina todo lo que se está realizando con determinadas posiciones y fuerzas políticas", al tiempo que acusó al PSOE de seguir dando cobertura "a una Ley que es fuente de litigio y de consecuencias políticas de persecución a la izquierda abertzale".
En una entrevista en Herri Irratia-Loyola Media, recogida por Europa Press, Díez Usabiaga se refirió también al proceso y reconoció que "era muy difícil abordar un proceso de soluciones políticas con el mismo tipo de soportes legales heredados del PP". Asimismo, lamentó que, en un escenario de tregua, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "se negara" a hacer cambios en la Ley de Partidos y a abordar medidas de carácter legal-jurídico, "que generarían una situación distinta para consolidar el diálogo, las famosas garantías que nunca se han puesto en práctica".
Calificó la situación actual como "mucho más complicada" que en etapas anteriores y señaló que tendrá "unas consecuencias graves, como estamos viendo en las últimas semanas en las acciones contra la izquierda abertzale y ahora este proceso judicial". Por ello, animó a que, de cara al futuro, se tenga "claro" que no se puede consolidar un escenario de soluciones políticas "con terapias que están criminalizando el diálogo y la solución al conflicto".
En su opinión, el Gobierno central debió ser "consciente" de que, si creaba "un escenario de compromisos por parte de ETA" que facilitara el diálogo y la negociación, tendría que generar también "elementos de cambio" y lamentó que no se dieran "lo que podían ser garantías mínimas".
Para Díez Usabiaga, es "indispensable" dotar a todos los agentes políticos de unas "mínimas condiciones" para asentar el diálogo, la negociación y los acuerdos, y señaló que, "mientras no haya una situación de esa naturaleza", la "interlocución política" de la izquierda abertzale estará encarcelada y se "criminalizará el diálogo con reuniones con Ibarretxe o Patxi López". En esta línea, subrayó que la apertura de juicio oral decidida ayer es "una buena prueba" de la razón por la que "se ha podido romper la esperanza de diálogo que se ha gestado".
ITINERARIO INADECUADO
Díez Usabiaga recordó que, cuando "Zapatero llegó a las tareas de gobierno y cuando abordó la situación política en Euskal Herria", manifestó su voluntad de "recorrer el camino hacia la paz". No obstante, consideró que "el itinerario no ha sido el adecuado, ni en compromisos ni en voluntad" y censuró que el presidente afirmara estar "preparado para el combate". "Lo estamos viendo perfectamente", subrayó.
En esta línea, el secretario general de LAB apuntó que, "de cara al futuro, es evidente que en este país el conflicto político sólo tiene solución en clave de diálogo y negociación" y generando un espacio de paz y de respeto "a Euskal Herria y a la voluntad de la ciudadanía", por lo que consideró "fundamental" que el PSOE aborde "una segunda transición en modelo territorial".
"Si hay una segunda transición, si concibe un estado plurinacional, podremos empezar a hablar de un segundo tiempo", recalcó. "El diálogo y la negociación vendrán cuando el PSOE asuma que tiene que abrir un proceso de soluciones políticas desde una concepción de segunda transición en modelo territorial", agregó.
Según dijo, durante el proceso de negociación "todas las cartas quedaron encima de la mesa", pero fue "el Gobierno español el que no dio pasos".
A su entender, los socialistas optan por "recrudecer unas políticas de represión que pretenden condicionar la posición política de la izquierda abertzale y debilitar su margen de maniobra político", a la vez que le acusó de estar "compitiendo" con el PP "para ver quién es más duro con la izquierda abertzale" y "quién defiende mejor la idea de España".
"Es la antítesis de unas posiciones políticas que deberían estar en otras referencias", indicó, para añadir que esto demuestra que el PSOE "no tiene una alternativa en modelo de Estado diferente a la del PP en relación a Euskal Herria".