Díez Usabiaga reconoce contactos entre Gobierno y la izquierda abertzale y dice que Zapatero debe dar más pasos

Dice que el 21 tendrá que ser una jornada "de respuesta" al auto de Grande-Marlaska y pide coherencia al Gobierno vasco

Europa Press Nacional
Actualizado: jueves, 19 enero 2006 13:08

BILBAO, 19 Ene. (EUROPA PRESS) -

El secretario general de LAB, Rafa Díez Usabiaga, reconoció hoy contactos entre el Gobierno del PSOE y la izquierda abertzale de "diferente naturaleza", aunque dijo que desconoce su "literalidad". Además, manifestó que el próximo sábado tendrá que ser una jornada "de protesta y respuesta" al auto del magistrado de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska, y pidió "coherencia" al Gobierno vasco. "Tiene que hacer una lectura en clave política de lo que va a hacer en el acto del día 21", aseveró.

En una entrevista a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, Díez Usabiaga señaló que no conoce "la literalidad de lo ha podido ser la comunicación del Gobierno y la izquierda abertzale". "En ese espacio de comunicación hay también interlocuciones de diferente naturaleza y contenidos de diferente naturaleza", precisó.

No obstante, puntualizó que "construir o pretender abordar un escenario de soluciones, diálogo y negociación necesita romper con las herencias e inercia en las cuales también colaboró el PSOE, como en la Ley de Partidos".

Sobre la situación creada tras el auto de Grande Marlaska, el líder de LAB señaló que la izquierda abertzale aborda "estas situaciones especiales, estos cuellos de botella con tranquilidad política" y precisó que "estas actuaciones del poder judicial y político no van a condicionar la apuesta de la izquierda abertzale por un escenario de soluciones".

"La izquierda abertzale no va a salir de ese carril de ofrecer a este país, a las nuevas generaciones, un escenario de paz, de democracia plena desde el respeto a la voluntad de los hombres y mujeres de Euskal Herria", añadió.

A su juicio, "hay que hacer frente a una decisión que vulnera derechos elementales y hacer frente también, en la medida de lo posible, con el nivel de responsabilidad de otras fuerzas políticas y sindicales".

Además, dijo que el Gobierno vasco, "si es coherente con todo lo que ha venido diciendo en relación a la legitimidad del acto de Anoeta, tiene que asumir su responsabilidad, hacer una lectura en clave política de lo que va a hacer o no hacer en el acto del día 21 o en la convocatoria que está realizada para el 21".

"En este momento no hay nada cerrado, la izquierda abertzale está, como es conocido, realizando gestiones con partidos y organizaciones sindicales", añadió.

En este sentido, puntualizó que "le toca a Batasuna definir con total claridad qué es lo que se va a hacer en la jornada del día 21, pero lo que sí es evidente es que esa jornada tiene que significar la protesta y la respuesta a un auto que vulnera derechos fundamentales, de acción política, los derechos de un importante sector de la sociedad vasca y eso compete a la izquierda abertzale y al conjunto de la clase política de este país".

ACTITUD DEL PNV

Rafa Díez afirmó que "no es de recibo" y es "una irresponsabilidad política" la actitud del PNV porque, "cuando el señor Grande-Marlaska y el Estado arremeten contra una formación política con ese auto y con esos contenidos, encima el señor Imaz pretenda situar las claves de responsabilidad en la izquierda abertzale, y quitar presión y responsabilidad al PSOE y a todo lo que acontece, en estos momentos, en ámbitos judiciales y políticos en el Estado".

En su opinión, en la actualidad, cada día que se produce un acercamiento "a momentos que pueden ser puntos de inflexión en el escenario político, los factores de presión, condicionamiento y sabotaje van a ser mayores y eso lo sabe bien la izquierda abertzale".

"Pero sobre todos esos factores de sabotaje político, no sólo tiene que actuar la izquierda abertzale, tiene que responder el conjunto de la clase política, de la sociedad vasca y tenemos que situar, evidentemente, las responsabilidades en su punto de referencia y responsabilidades que tiene, por supuesto, el propio Gobierno socialista", apuntó.

Para el dirigente abertzale, el auto del magistrado de la Audiencia Nacional "necesita la respuesta firme, democrática, del conjunto de fuerzas y organizaciones sindicales que están comprometidos con un escenario de paz y democracia para nuestro país". "Por lo tanto, va más allá de lo que pueda hacer o no la propia izquierda abertzale y ésa es la reflexión que el señor Imaz, al parecer, no quiere realizar", indicó.

PSOE

Díez Usabiaga destacó que "es hora de que el PSOE asuma su responsabilidad en lo que debe ser la creación de condiciones políticas para abrir proceso de diálogo y negociación". "Y desde la negación de la actividad política de la izquierda abertzale es imposible construir un proceso de diálogo y soluciones", agregó.

A su entender, la actual situación creada es consecuencia "de las inercias y la herencia de una determinada estrategia que siguen sacudiendo la vida política de este país, con la permisividad también de un PSOE que no sabe realmente vertebrar con coherencia lo que tiene que ser un discurso y una frase acorde a los nuevos tiempos que demanda la gran mayoría de la sociedad vasca".

En este sentido, dijo que existen resoluciones judiciales de "impulso político, que pretenden condicionar, sabotear lo que es un camino que tiene grandes dosis de irreversibilidad, un camino hacia un nuevo escenario político, de respeto a Euskal Herria, de búsqueda de soluciones definitivas y de paz".

En este contexto, enmarcó no sólo el auto de Grande-Marlaska, sino también las declaraciones del teniente general del Ejército, José Mena Aguado, "que significaron un terremoto político importante", o las del presidente del Tribunal Supremo, Francisco Hernando.

"Nos encontramos con actuaciones de gran calado, que en un Estado democrático podrían ser consideradas como pequeños factores de golpe de Estado a las decisiones políticas y pautas políticas. Desde luego, sobre esto, el PSOE tiene que hacer una reflexión de alcance, si no quiere estar permanentemente en la noria y en el ritmo político que puede aplicar y proyectar el PP", insistió.

El representante de la izquierda abertzale indicó que "no se puede, por un lado, abordar un discurso positivo" como hizo José Luis Rodríguez Zapatero "hace unos días" a favor del derecho de reunión y, posteriormente decir, en referencia a la resolución judicial de la Audiencia Nacional, "lo bien que funciona el Estado de Derecho".

"Tras año y pico ya de Gobierno de Zapatero se deberían haber dado ya pasos muy más concretos en lo que debe ser la normalización de la vida política de este país, la aceptación de las realidades políticas diferenciadas existentes, porque ése es un elemento básico, fundamental, para que el diálogo y la negociación política realmente se conviertan en operativas y eficaces", subrayó.

Por último, rechazó que "la pelota esté en el tejado de la izquierda abertzale", sino en la de todos. "Y el Gobierno español también tiene que romper amarras con toda la estrategia de acoso y derribo que está articulando el PP desde muchos frentes", señaló.

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