El director del CNI da por concluidos los cambios internos tras la salida de Saiz, realizados con criterios jerárquicos

Actualizado: martes, 3 noviembre 2009 20:41

Sanz Roldán asegura que una auditoría confirma que no hubo desvíos de fondos y achaca la crisis a nombramientos discrecionales anteriores

MADRID, 3 Nov. (EUROPA PRESS) -

El director del Centro Nacional de Inteligencia, general Félix Sanz Roldán, ha dado por cerrada la estructura interna del CNI con los cambios realizados tras la salida de su predecesor en el cargo, Alberto Saiz, relevos que ha ido promoviendo con los criterios básicamente jerárquicos, de escalafón y experiencia.

Hace unas semanas tanto el director de Operaciones, Francisco Montes, como la directora de Inteligencia, Raquel González, afectos al anterior jefe del CNI, presentaron su dimisión antes de ser cesados, y fueron sustituidos por dos nombramientos conocidos por el Consejo de Ministros. Más recientemente ha sido despedida del servicio secreto la ex jefa de Gabinete y mano derecha de Saiz, secretario de Estado y director del Centro hasta el pasado 2 de julio.

Durante su comparecencia ante la Comisión de Gastos Reservados del Congreso de los Diputados, el general ha planteado que en los nuevos nombramientos ha seguido los criterios de "escala" y de "edad mayor de cincuenta años", puesto que él considera que el problema de fondo en el CNI es la "inexistencia de una jerarquía, de una carrera profesional" y, por tanto, la "discrecionalidad en los nombramientos".

Según indicaron a Europa Press asistentes a la reunión, el actual jefe de la Inteligencia trataría así de recuperar el modelo "militar" y "piramidal", en el que los nombramientos se producen "porque tocan".

Así, Sanz Roldán atribuye los problemas internos en el CNI a decisiones discrecionales en los nombramientos que "se saltan el escalafón", algo que se produce por ejemplo cuando se nombra a un capitán sobre un teniente general, o cuando se nombra como personal de confianza a alguien que no es el "primero que está en la escala". A juicio del director del Centro, esa discrecionalidad provoca "agraviados internos".

En esta línea, el ex JEMAD podría estar pensando, a tenor de sus palabras en la Comisión, en una "carrera profesional rígida, con tenientes, capitanes, comandantes, y con un planteamiento puramente militar". Además, Sanz Roldán puntualizó que en la nueva dirección no se ha nombrado a ninguno de los que puedan considerarse agraviados por esa discrecionalidad.

"LOS GASTOS ESTÁN JUSTIFICADOS"

Alberto Saiz presentó su dimisión a principios del pasado julio tras la publicación durante casi tres meses de numerosas acusaciones, provenientes de agentes del CNI, en las que denunciaban que el director se había aprovechado de los fondos públicos del Centro en beneficio propio. Acerca de estos gastos, Sanz Roldán explicó en su comparecencia que pidió una auditoría interna al acceder al cargo, según la cual "no hay irregularidad, los gastos están justificados" y no se aprecian "desvíos".

Sanz Roldán también aseguró que no conoce el informa que la ministra de Defensa, Carme Chacón, encargó tras conocer las acusaciones vertidas contra Saiz. El pasado 10 de septiembre la portavoz del PP en la Comisión de Defensa del Congreso, Beatriz Rodríguez Salmones, solicitó al Gobierno este informe, y ayer denunció que todavía no lo ha recibido. Esto motivó que la portavoz parlamentaria 'popular', Soraya Sáenz de Santamaría, asegurara a su salida de la Comisión que no estaba "nada satisfecha" con las explicaciones dadas por el jefe de los espías.

Por otro lado, el PP preguntó durante esta comparecencia sobre la situación de las relaciones con Cuba, después de que las autoridades de la isla accedieran, durante la reciente visita a La Habana del ministro Miguel Ángel Moratinos, a que agentes de inteligencia españoles regresen a la isla tras su salida forzosa en marzo. Sin embargo, Sanz Roldán se limitó a recalcar que esto está "en vías de solución" y que él no pensaba "dificultaba", por lo que agregó que explicaría el proceso una vez finalizado.