Dos hermanos acusados de amenazar de muerte a policías dicen que sólo se trató de una trifulca casual

Hermanos Saralegi
POOL
Actualizado: jueves, 15 septiembre 2011 15:23

MADRID, 15 Sep. (EUROPA PRESS) -

Los hermanos Daniel y Xabier Saralegui negaron hoy ante un tribunal de la Audiencia Nacional, que les juzga por la presunta comisión de un delito de amenazas terroristas, haber gritado a los escoltas de un concejal de Unión del Pueblo Navarro (UPN) 'Hijos de puta, txakurras, vais a morir'. Ambos han defendido que el enfrentamiento con los policías sólo se trató de una trifulca fortuita en la que se intercambiaron "gestos" por ambas partes.

La fiscal Carmen Monfort ha elevado a definitiva su petición para ambos de una pena de un año y ocho meses de prisión por la comisión de un delito de amenazas terroristas. Los hechos se remontan a noviembre de 2010 cuando los dos hermanos se dirigieron a los agentes, a los que, según aseguran los policías, amenazaron de muerte. Los escoltas precisan, además, que cuando caminaban hacia su vehículo oficial uno de ellos, Daniel, metió la mano en un bolsillo y, al sacarla, hizo ademán de activar un mando a distancia, en un gesto que los escoltas interpretaron como imitación de la acción previa a la explosión de un turismo.

Los dos acusados, representados por la abogada Amaia Izco, desmintieron en la vista oral la versión de los agentes y explicaron que se encontraban en su portal esperando a un primo con el que habían quedado cuando observaron que uno de los escoltas les miraba desde la acera de enfrente.

A partir de este punto los dos han coincidido en que vieron al policía "hacer gestos" y "pegar gritos" que no llegaron a entender y han agregado que ellos también realizaron muecas y les pidieron que les dejaran en paz.

No obstante, desmintieron haber realizado en ningún momento movimientos con la mano intentando simular la activación de una bomba y han achacado la confusión de los policías a que llevaban un móvil en la mano.

Además, han indicado que mantenían buena relación con el concejal de UPN al que protegían los policías que --han dicho-- incluso intercambiaba saludos con el padre de ambos al que conocía por su trabajo como encargado de la sala de togas de la Audiencia Provincial.