BARCELONA 29 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Plataforma pel Dret de Decidir (PDD) y Sobirania i Progrés (SiP) recogerán firmas durante la jornada electoral del 9 de marzo para pedir que el Parlamento reclame al Gobierno central la competencia de convocar referéndums sin el consentimiento del Estado.
Para ello, instalarán mesas "en el máximo número posible de pueblos de los Països Catalans" para recoger firmas, según explicaron hoy en una rueda de prensa conjunta ante el Parlamento.
Las dos plataformas soberanistas enmarcaron la iniciativa en la campaña 'Decideixo decidir!', que impulsó la PDD el 23 de abril de 2007 con el fin de reclamar que Cataluña "pueda decidir sobre todo lo que le afecta". De entrada, los organizadores prevén entre 400 y 500 mesas distribuidas por los territorios de habla catalana.
Las firmas que recojan las trasladarán a la Comisión de Peticiones del Parlamento de Cataluña para que reclame al Estado el traspaso de la competencia para que la Generalitat pueda convocar referéndums de forma unilateral y en base a la "radicalidad democrática", según apuntó la portavoz de la PDD, Mònica Sabata, y al artículo 150.2 de la Constitución, que contempla la posibilidad de traspasar competencias exclusivas del Estado a las comunidades autónomas.
"Se trata de una acción impulsada por la sociedad civil, que se organiza y sale a la calle para decir que queremos poder decidir", dijo Sabata, que desvinculó el acto de las elecciones. Sabata consideró que la sociedad civil "debe poder ser un actor que marque la agenda política", al margen de los partidos políticos.
El texto del Estatuto ya prevé el desarrollo de una ley de consultas populares, pero sólo reserva a la Generalitat la capacidad de convocarlos, y siempre bajo la autorización del Estado.
'KIT 9-M'.
Uno de los impulsores de la iniciativa, Víctor Cucurull, presentó lo que denominó el 'kit 9-M', formado por una caja de cartón con los logotipos de las dos entidades, dentro de la cual habrá 100 pañuelos reivindicativos, adhesivos y 200 formularios para firmar. Se distribuirán 100.000 formularios de adhesión a la campaña, que se suman a los 100.000 que repartieron el 23 de abril y que aún no han sido contabilizados.
Las entidades que quieran participar formando una mesa de recogida de firmas deberán abonar 100 euros por el material, y, si venden los 100 pañuelos al precio fijado de dos euros, doblarán la inversión inicial, de manera que se cubrirán los costes de campaña y se contribuirá a la financiación de las entidades colaboradoras.
"ESTRICTA LEGALIDAD".
El abogado Oriol Munné explicó que los impulsores recomendarán a los participantes que se sitúen en "lugares céntricos" y de paso de la gente, pero sin "interferir" en la jornada electoral. En este sentido, tienen intención de que la campaña se desarrolle en el marco de la "estricta legalidad", por lo que reclamarán a los participantes que se coloquen a una distancia "prudente" de las mesas electorales.
En cualquier caso, dentro de las cajas del 'kit 9-M', habrá una lista con los criterios legales que deberían seguir los impulsores territoriales de la campaña para solicitar permiso a los ayuntamientos para instalar los puntos de recogida de firmas. Prevén realizar el recuento de adhesiones al final de la campaña electoral.
Se trata, según la portavoz de SiP --plataforma que cuenta con 20.340 adheridos--, Elisenda Paluzié, de dar un "nuevo impulso" a la campaña 'Decideixo Decidir!' dándole "voz a la nación". Por eso, hizo un "llamamiento" a la sociedad para que participen en la acción y se instalen "el máximo número de mesas".
Además de la iniciativa concretada en el Parlamento catalán, las plataformas indicaron que si hay "volumen suficiente" de apoyo en las mesas que se instalarán en la Comunidad Valenciana y Baleares, trasladarán la misma petición en sus parlamentos autonómicos. En este sentido, ya confirmaron la instalación de mesas en Ibiza, Perpignán (Francia) y la Franja de Aragón.