Asegura que su pretensión es llevar la consulta, "desde su aprobación" en el Parlamento vasco "hasta su celebración" en octubre
BILBAO, 5 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente del GBB y portavoz parlamentario del PNV, Joseba Egibar, advirtió hoy de que si se suspende la Ley de Consulta, habrá que "denunciarlo y poner a Zapatero en su sitio". Además, aseguró que su pretensión es llevar la consulta, "desde su aprobación" en el Parlamento vasco en junio, "hasta su celebración" en octubre.
En una entrevista concedida a Herri Irratia-Loyola Media, Egibar señaló que "las consultas democráticas, en ningún caso, debilitan el sistema democrático, al contrario, la prohibición de consultas hace que la ciudadanía se aleje del sistema democrático".
"Lo verdaderamente grave sería que un gobernante, en este caso José Luis Rodríguez Zapatero, valiéndose de una prerrogativa constitucional el 161.2, promoviera una decisión del Consejo de Ministros que promoviera la suspensión de un acuerdo política", añadió.
A su juicio, "la pregunta es si 'se atreverá un gobernante que se dice demócrata a suspender una decisión política que apruebe el Parlamento Vasco por el hecho de que él no esté de acuerdo'"
En cuanto a la posible respuesta de la formación jeltzale en el caso de que se produjera "algún tipo de traba o suspensión a esa Ley", Egibar fue tajante y dijo que, "si eso se produce, habría que denunciarlo y poner a cada cual en su sitio, al señor Rodríguez Zapatero también".
Sobre la postura que mantendrán los parlamentarios de EHAK, señaló que "van a analizar el contexto, las preguntas" y dijo que "es un ejercicio parlamentario que, en este caso, sintiéndose presionadas como grupo parlamentario, ellos verán exactamente cuándo desvelar su propia posición".
"Creo que más allá del 'dribbling', estamos hablando de una cosa seria, con independencia del camino recorrido por el PNV o por la izquierda abertzale de esa expresión parlamentaria, cada cual es responsable de sus propios actos y de sus propias decisiones", apuntó.
En su opinión, el 27 de junio "la posición tiene que ser sólida por parte de quien se tiene que posicionar". "La nuestra es clarísima y la de EHAK responderá, no sé si antes o en el propio pleno", puntualizó.
Joseba Egibar llamó a la serenidad sobre esta cuestión, y en referencia a las palabras del presidente de EBB, Iñigo Urkullu, que "lo dicho es correcto". Asimismo, recordó que tienen la iniciativa del proyecto de Ley "calificada" en el Parlamento, con un escrito de reconsideración del PP.
Asimismo, destacó que "lo principal es sacar la Ley adelante y que la Ley sea aprobada". "Estamos hablando de una Ley de consulta para una fecha concreta, para el 25 de octubre, con dos preguntas que pretenden encarar la problemática a través de una pregunta y una respuesta clara por parte de la ciudadanía", señaló.
A su juicio, "los dos temas troncales, tanto en el tema de la pacificación como el acuerdo político", son dos vías de trabajo, y "la consulta, como tal, es el valor o el salto cualitativo en orden a la resolución de estos dos grandes temas".
Preguntado por las palabras de Urkullu, reiteró que "las palabras son correctas depende dónde se mete el subrayado" en la entrevista y recalcó que "lo verdaderamente grave sería que un gobernante, en este caso José Luis Rodríguez Zapatero, valiéndose de una prerrogativa constitucional el 161.2, promoviera una decisión del Consejo de Ministros que promoviera la suspensión de un acuerdo político".
"La pregunta es 'se atreverá un gobernante que se dice demócrata a suspender una decisión política que apruebe el Parlamento Vasco por el hecho de que él no esté de acuerdo", dijo, para precisar que Zapatero sabe que "el principio elemental en la construcción de un sistema democrático es respetar no ya lo que la ciudadanía pueda decir sino un Parlamento democrático y legítimamente pueda decidir".
"Esa sería la decisión a respetar, la gravedad sería que un gobernante, en este caso el presidente del gobierno español, promoviera la suspensión, es lo escandaloso", manifestó.
Joseba Egibar apuntó que, en ese caso, "estaríamos ante gobernantes de escaso nivel democrático y un sistema que está dando los mínimos de lo que puede ser calidad democrática". "Si ya el político adelanta que echará mano de un instrumento como es el de la suspensión y si adelanta que la sentencia o el auto del constitucional va a ser de ratificación de la suspensión, ¿en qué país se ha visto?", aseguró.
En este caso, citó como ejemplo el de Québec, y explicó que, "en el caso de Québec, nadie cuestionaba que la ciudadanía pudiera ser consultada".
Recordó que, a finales de junio, se celebrará un pleno en el que "su prioridad es sacar esa Ley adelante". "El tripartito presenta un proyecto de Ley para que se apruebe y veremos, a partir de ahí, qué decisiones adopta el Gobierno español", resaltó.
Asimismo, confió en que "el pronunciamiento parlamentario mayoritario sea en una dirección" y mostró su esperanza en que el Gobierno "no intente cortar esa vía de desarrollo político a través de suspensiones".
En esta ocasión, "sobre aquellas bases, se va a unas coordenadas más generales de mayor calado, dando la voz y la palabra y la decisión a la ciudadanía", trabajando "sobre esa doble vía de paz y acuerdo político, tiene antecedentes el señor Rodríguez Zapatero cuando menos en relación, conocimiento y verificación de los textos que el lehendakari le remitió hace escasamente un mes".
Según Egibar, "la ciudadanía es consciente, no es tonta, sabe exactamente de qué estamos hablando y qué queremos abrir con esta consulta el valor de la consulta está más allá de una práctica democrática está en el compromiso y la implicación de la ciudadanía, al parecer es lo que algunos no quieren permitir".
"Que la ciudadanía pueda opinar desde una encuesta o foro, pero no con una consulta y cuando el Parlamento dice sí y alguien responde 'no' o te voy a impedir será el propio parlamento el que tenga que valorar", dijo.
SIN 'PLAN B'
En referencia a si existe un 'plan B', dijo que no existe "ningún plan de huida" y precisó que tienen "experiencia y suficiente sufrimiento en este país por la falta de paz y necesidad de paz". "Queremos resolver el problema político y la ciudadanía ha entendido perfectamente lo que estamos diciendo con las dos preguntas, buscamos esa implicación esperemos conseguir tanto en el Parlamento como después el 25 de octubre", apostilló.
Respecto a si aceptaría un escenario sin consulta una vez aprobado en el Parlamento, dijo que él no tiene "ninguna confianza en el Tribunal Constitucional". "Es una constante histórica en la posición del PNV, pero no me gustaría, como demócrata, una situación en la que se impidiera la celebración de una consulta aprobada por el Parlamento Vasco. Creo que la reacción y respuesta a eso hay que hacerlo con el mayor grado de inteligencia y contundencia", manifestó.
Asimismo, dijo que "confrontar es cotejar posiciones". "Una cosa es confrontar y otra enfrentar las posiciones democráticamente expresadas. Si así se ha expresado el Parlamento vasco, cuando menos el contraste o la confrontación se tiene que producir. ¿Desde qué atalaya política un gobernante, valiéndose de una prerrogativa como la que apunta el 161.2, se va a atrever a suspender la decisión democráticamente adoptada por un Parlamento Vasco que, a su vez, quiere impedir una consulta?", preguntó.
Para el presidente del GBB, la paralización de la consulta supondría "el mayor ataque que se podría practicar al sistema democrático". "Las consultas democráticas en ningún caso debilitan el sistema democrático, al contrario, la prohibición de consultas hace que la ciudadanía se aleje del sistema democrático, vamos a intentar llevar el escenario desde la aprobación hasta la celebración de la consulta", concluyó.
