MADRID, 25 May. (EUROPA PRESS) -
España no participará con su contingente militar de más de 500 efectivos ni financiará directamente la misión de entrenamiento de las nuevas fuerzas de seguridad kosovares que comenzará en los próximos meses la Fuerza de la OTAN en Kosovo, según aseguraron a Europa Press fuentes de la Alianza Atlántica.
Las fuentes consultadas subrayaron que España ya ha comunicado al resto de países de la Alianza Atlántica que no participará en la nueva misión y que tampoco aportará directamente fondos económicos para la formación de las fuerzas de seguridad, excepto el porcentaje que le corresponden como miembro de la OTAN y que representarán menos del uno por ciento del total del presupuesto.
A pesar de rechazar tomar parte en uno de los principales objetivos que tendrá la KFOR en los próximos meses, tras la declaración de independencia aprobada en febrero por el Parlamento de Kosovo, España continuará participando con sus Fuerzas Armadas en la misión de la Alianza Atlántica.
Las mismas fuentes explicaron que España no será el único país que se autoexcluirá de la misión de adiestramiento de las fuerzas de seguridad de Kosovo y de su financiación, toda vez que otras naciones como Rumanía o Eslovaquia ya han expresado al resto de países de la OTAN su intención de seguir la misma línea.
Las fuerzas de seguridad de Kosovo estarán compuestas por unos 2.500 efectivos distribuidos por un territorio que tiene un tamaño similar al de la comunidad autónoma española de Asturias. Esta cifra se aproxima al total de militares que el Ejército de Tierra español tiene en toda la comunidad de Galicia destinados en la Brigada de Infantería Ligera Aerotransportable (BRILAT) y sus unidades de apoyo.
Las fuentes consultadas recalcaron que España mantendrá su misión militar en Kosovo por estimar que supondría un error retirarse de esta operación de mantenimiento de la paz y entender que la resolución 1244 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ampara la misión de KFOR y le encomienda garantizar la seguridad en la región. Aprobada el 10 de junio de 1999, la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU afirma además, en su décimo punto, que el pueblo kosovar tendrá "una autonomía sustancial dentro de la República Fedeativa de Yugoslavia".
España mantiene desplegado en Kosovo un contingente de unos 580 militares en el marco de la Fuerza de la OTAN (KFOR), que cuenta con 15.900 efectivos. El grueso de las tropas, al mando de un teniente coronel, está destacado en la Brigada Multinacional Oeste y tiene su base en la localidad de Istok. El contingente se completa con un destacamento de unos cien militares en el Valle de Osojane, un enclave serbio en el que los soldados españoles protegen a civiles y religiosos cristianos.
La posición española de rechazo a la misión de adiestramiento fue adelantada esta misma semana por el jefe de Estado Mayor de la Defensa de Serbia, el general Zdravko Ponos, quien aseguró que España y Rusia han rechazado la posibilidad de que sus contingentes militares desplegados en KFOR entrenen a las nuevas fuerzas de seguridad de la región balcánica tras la declaración de independencia del pasado mes de febrero.
Según explicó el propio general en declaraciones a la agencia de noticias serbia BETA, Rusia y España se oponen a la posibilidad de que la misión militar de la Alianza Atlántica se haga cargo de la formación de las fuerzas de seguridad kosovares e insisten en que los soldados de la OTAN deben ceñirse a la misión que les encomienda la resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas 1244.
Tras reunirse en Bruselas con el jefe de Estado Mayor de la Defensa español (JEMAD), general de Ejército Félix Sanz Roldán, y con su homólogo de la Federación Rusa, el general Yuri Baluyevski, el más alto mando militar serbio afirmó ayer que la situación actual en Kosovo no cambia a pesar de lo que haga o declare el Ejecutivo liderado por Hashim Thaci.
Al término de la reunión de los jefes de Estado Mayor de la Defensa de la Alianza Atlántica con sus homólogos de los países integrados en el Programa Asociación por la Paz (PfP, en sus siglas en inglés), el general Ponos incidió en que las fuerzas militares, incluido el Ejército serbio y la KFOR, tienen la responsabilidad de vigilar de cerca la situación de seguridad en la región balcánica.
"Las declaraciones políticas que se han realizado no tienen consecuencias en materia de seguridad son sólo una razón adicional para la acción política y legal por parte de Serbia.. Nosotros estamos adoptando ya medida legales, entre las que se incluyen mis actividades en la OTAN", explicó el JEMAD serbio.
El general subrayó además que ha comunicado al secretario general de la OTAN, Jaap de Hoop Scheffer, que su país considera que una autorización a KFOR para asumir el entrenamiento de las fuerzas de seguridad kosovares supondría una violación de la propia naturaleza de la misión de la Alianza tal y como está contemplada en la resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas que la ampara.
