TOLEDO, 22 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, dijo hoy estar "muy animado y más dispuesto que nunca" a "la lucha y a mantener las exigencias" recogidas en el Estatuto de Autonomía, sobre el que se pedirá su retirada del Congreso de los Diputados tras la votación de ayer. También opinó que José Manuel Molina, ex presidente del PP en Castilla-La Mancha, o cualquier otro dirigente del PP "que de verdad está comprometido por su tierra, que de verdad fuera de aquí, que de verdad comprendiera lo que somos y qué necesitamos", no se hubiera comportado como la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal.
En declaraciones a Radio Castilla-La Mancha recogidas por Europa Press, Barreda dijo que no le sorprende nada el comportamiento "de una persona que es capaz de decir una cosa aquí y la contraria, inmediatamente después, en otro lugar; una persona que es capaz de adquirir un compromiso y de votar por unanimidad en las Cortes de Castilla-La Mancha, y después hacer todo lo contrario en el Congreso de los Diputados".
Lamentó que Cospedal no fuera "valiente y coherente" para subirse a la tribuna del Congreso "como hice yo" cuando hubo que defender el Estatuto de Autonomía en el pleno de su toma en consideración y, sin embargo, "rehusó hacerlo". "Aquello fue un mal augurio. La verdad es que su palabra ni siquiera es papel mojado, porque para mojar el papel se necesita agua y un mínimo de consistencia", lamentó.
Preguntado por su estado de animo, el presidente dijo sentirse "muy apoyado" por su gente, "ayer mismo se visualizó ese apoyo", con los miembros de la Mesa del Agua de Castilla-La Mancha, al tiempo que desveló que durante su visita hoy en Valmojado y Mora, en Toledo, "la gente me animaba, me empujaba, me decía 'has hecho lo que debías', es una cuestión de dignidad, ya habíamos cedido demasiado".
"Yo estoy muy animado y más dispuesto que nunca a la lucha, a mantener las exigencias, a presentar nuestras reivindicaciones, cuenca a cuenca, río a río, plan a plan, vamos a defender a todas las ciudades y pueblos de la cuenca del Tajo, del Júcar, del Segura, a los regantes, porque es nuestra obligación, y ahora más que nunca lo que no podemos hacer es amilanarnos", agregó Barreda.
Sobre la propuesta del Partido Popular y si cree que ésta ha sido redactada por el presidente de la Región de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, el presidente regional aseguró no tener ninguna duda y se preguntó qué hacía el presidente de Murcia en el Congreso de los Diputados el día que se discutía sobre el Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha.
"Solamente desde Murcia o desde la ignorancia se puede plantear un papel en el que se olvide la reserva estratégica de agua, en la que se rehuya hablar del trasvase, en la que se pretende que el Gobierno de Castilla-La Mancha no tenga derecho a ser informado previamente de cualquier decisión sobre trasvases de agua que vayan afectar a nuestra tierra, es impensable", exclamó el presidente autonómico.
LO OCURRIDO EN ARAGÓN
En este sentido, Barreda indicó que la "tragedia" es que todo el mundo ha hecho lo que se supone que tenían que hacer, poniendo como ejemplo al PP de Aragón, que "defendió" a su comunidad autónoma y apoyó una reserva estratégica en el Estatuto de Autonomía de Aragón, pese a que gobierna el PSOE, al igual que los socialistas de Murcia y Valencia que han estado defendiendo los intereses de su tierra.
Barreda, asimismo, dijo no entender cómo Cospedal en vez de defender los intereses de Castilla-La Mancha se ha puesto "a favor de Murcia" cuando pretende gobernar la Junta de Comunidades. Además, el presidente calificó de "anomalía democrática" que no Cospedal no quiera reunirse con ella y justificó esto en que la presidenta regional del PP "no acabe de sentir los colores".
"Ella vino aquí como caída del cielo, ella era consejera de otra comunidad autónoma, nunca había tenido relación con nuestra tierra, lo ignoraba absolutamente todo de nosotros, no sabe cuál es la problemática en realidad, no sabe cuáles son las necesidades de las cuencas, sobre esto del agua sabe muy poco, por eso al final quien se lleva el gato al agua cuando discute es Valcárcel", opinó.
El presidente lanzó un mensaje de tranquilidad, asegurando que el hecho de que "no tengamos Estatuto no va a significar ni muchísimo menos que nos vayamos a cruzar de brazos en relación con el agua, y que no vayamos a ser más exigentes todavía si cabe en los planes que hay que negociar cuenca a cuenca, en defender, desde luego, el uso preferente, en exigir el cumplimiento de la normativa actual". "Esto es sólo una escaramuza, el trabajo continúa", subrayó.
Finalmente, Barreda avisó al PP que "la gente es muy lista y sabe lo que está haciendo cada cual, y lo que está diciendo cada cual". También aprovechó para decir que él se ha tenido que "fajar y hacer un gran esfuerzo porque en el Grupo Parlamentario Socialista también hay contradicciones, pero yo he conseguido que votaran a favor, y lo hicieron, y eso es una verdad incuestionable".
