MADRID, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -
El PP y el PSOE han decidido apurar la negociación sobre el Estatuto de Castilla-La Mancha que se tramita en el Congreso ante la inminente marcha de quien ha pilotado las conversaciones entre ambos partidos y con el Gobierno, el socialista Ramón Jáuregui, y esperan que, tras el "paréntesis" propiciado por las vacaciones de Semana Santa, se puedan acercar posiciones "en frío" y lejos de los focos.
Según señalaron fuentes parlamentarias a Europa Press, la entrada de Jáuregui en la lista del PSOE para las europeas como número 'dos' ha precipitado la necesidad de llegar a un acuerdo para dar salida a todo lo avanzado entre los dos principales partidos desde que se admitiera a trámite el estatuto manchego en el Congreso el pasado mes de octubre.
Las negociaciones ya habían perdido otro baluarte, Francisco Caamaño, que hasta su nombramiento como ministro de Justicia venía representando al Gobierno en las reformas estatutarias como secretario de Estado de relaciones con las Cortes y Asuntos Constitucionales.
DESPEJAR "EL SÍ O EL NO"
Así, los partidos aspiran a que en las reuniones previstas para los próximos días se conozca "el sí o el no" del futuro de la reforma estatutaria al considerar que el tiempo transcurrido desde que se constituyera la ponencia, el pasado 11 de marzo, ha propiciado que se calmen los ánimos y no "culmine" la ruptura que se escenificó entonces.
Se trata de dar "un último impulso" al estatuto manchego y certificar "si hay posibilidad de acuerdo" en los dos puntos de la discordia que tienen que ver con el agua y la forma de encajar la caducidad del trasvase del Tajo-Segura que las Cortes de Castilla-La Mancha fijaron en 2015, el preámbulo y la disposición transitoria primera.
Las fuentes consultadas insisten en que el texto está ya "muy cruzado" y que únicamente queda por "ultimar algunos flecos" sobre los que no se logra el acuerdo tras la negativa del PP de incluir la fecha del 2015 en el preámbulo como proponía el PSOE y que llevó a los partidos a presentar sus enmiendas por separado el pasado mes de febrero.
"EL ESTATUTO NO ESTÁ MUERTO"
Por ello, los negociadores no cejan en la búsqueda de la "fórmula feliz" que satisfaga a todas las partes y hacen hincapié en que el estatuto "no está muerto", recordando las declaraciones de dirigentes socialistas y 'populares' en esta línea en las que se pone de manifiesto la voluntad de diálogo de ambas partes para llegar a un acuerdo.
"Vamos a hacer un último intento", afirman los partidos, para quienes únicamente falta que los negociadores se sienten en torno a una mesa y se definan los "márgenes" de trabajo, siempre teniendo en cuenta que el objetivo es "sacar el texto adelante" y que, como se ha visto estos meses, ninguno de los partidos "tira de la cuerda lo suficiente para romperla".
En este contexto, los partidos subrayaron que el nombramiento del nuevo secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, José Luis de Francisco, no es ningún obstáculo para este fin al tratarse de alguien que procede del equipo de su antecesor en el cargo, Francisco Caamaño, y no es por tanto ajeno a la negociación que se ha venido llevando.
