MADRID, 1 Mar. (EUROPA PRESS) -
Uno de los dos acusados que están siendo juzgados en la Audiencia Nacional por colocar dos artefactos explosivos en un repetidor de telefonía de Mendibil (Álava) en 2009, Ander Arrue, se ha mostrado arrepentido de haber guardado el material pirotécnico que pudo ser utilizado en este atentado y que le pidió almacenar el otro procesado por estos hechos, Jokin Zerain.
Así se ha manifestado Ander Arrue en el juicio que se sigue contra él y contra Zerain por el ataque presuntamente perpetrado la noche del 11 de mayo de 2009 por un talde de ETA contra un repetidor de telefonía de Mendibil. El fiscal Vicente González Mota solicita sendas penas de 35 años de cárcel por un delito de pertenencia a organización terrorista, otro de estragos y uno de depósito de sustancias explosivas.
Durante la vista oral, Arrue ha manifestado que el otro inculpado le pidió que guardara en su camarote "una bolsa con petardos" y "por amistad" los mantuvo en un trastero hasta que Zerain se los pidió el mismo día del atentado. "Nos hemos criado juntos. Confiaba en él. Hemos estado toda la vida juntos", ha añadido. En el momento en el que inculpaba al otro acusado, algunos familiares y conocidos de éste último presentes entre el público han proferido insultos contra Arrue.
"¿Se arrepiente de haber guardado esta bolsa?. Sí mucho", ha respondido Arrue a preguntas de su abogado, ante quien ha añadido que si hubiera sido consciente de que la posesión de ese material pirotécnico le hubiera acarreado "problemas", "en absoluto" los hubiera custodiado.
Arrue ha negado haber participado en cualquier acción violenta y ha destacado que ha pagado unos 6.000 euros en concepto de responsabilidad civil ya que se sentía "culpable" por si aquellos petardos pudieron haber estado relacionados con el atentado. Además, ha relatado las dificultades que tuvo que afrontar a la hora de "encontrar abogado" cuando decidió salirse del Colectivo de Presos Políticos Vascos (EPPK).
PRESUNTO ETARRA DICE QUE FUMABA PORROS
Por su parte, Jokin Cerain ha asegurado que no ha participado en el ataque contra el repetidor de telefonía ni en ninguna otra acción de kale borroka. "No he hecho accioones de kale borroka, ni he ayudado a ETA, ni pertenezco a ella", ha mantenido, a preguntas del representante del Ministerio Público.
Al ser cuestionado sobre las bombonas de camping gas, el pin de ETA, la pegatina de la rama juvenil de la banda terrorista 'Segi', el spray de gas, las bridas de sujeción de color negro y rollo de papel plata autoadhesivo encontradas en su domicilio, Zerain ha explicado que compró las bombonas de camping gas el día de los hechos para utilizarlas en una "cena popular" organizada por familiares y amigos de presos etarras para recaudar fondos para este colectivo.
Ante el tribunal, presidido por el magistrado Javier Martínez Lázaro, Arrue y Zerain han explicado que ambos participaron en la cena, que se celebró días después del atentado, en solidaridad con los presos vascos.
Zerain ha indicado que guardaba spray de gas en su vivienda con la finalidad de "recargar mecheros" ya que en aquella época "fumaba tabaco y porros" y ha añadido que también se carteaba con presos de la banda terrorista ya que eran "amigos de la cuadrilla".
Tras sus declaraciones, han comparecido varios ertzainas que han sostenido "sin género de dudas" que Jokin compró el día del atentado cuatro bombonas de camping gas que, según sus pesquisas, fueron las utilizadas en el ataque terrorista. El juicio continuará este miércoles en la Sección Primera de la Sala de lo Penal.
Según el Ministerio Público, los dos acusados formaban un talde de la organización terrorista ETA y, en respuesta a la desarticulación del 'comando Ahiur', colocaron dos artefactos incendiarios, compuestos por cuatro bombonas, un cartucho de gas, un bote de aerosol de gas y cuatro cohetes pirotécnicos, en la base del repetidor de telefonía. Este atentado fue reivindicado por la organización terrorista el 22 de mayo de 2009 en el diario 'Gara'.