PARIS, 6 enero (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Aída Palau)
Los comandantes de la subdirección antiterrorista de la policía judicial francesa, Jerome Broglio y Jean Pargade presentaron hoy pruebas contra los siete presuntos terroristas arrestados en diciembre de 2001 en Auch, en el suroeste francés, que según la policía pertenecían al aparato de información y de formación de ETA.
Se trata del primer juicio en Francia contra presuntos miembros de ETA desde que la banda rompiera el alto el fuego el pasado 30 de diciembre con el atentado de Barajas en el que murieron dos personas. Los siete están acusados de pertener a una asociación de malhechores con fines terroristas.
Tres de los acusados son José Ramón Karasatorre, Juan Ramón Lete Alberdi y Miren Aitzane de Orcalaga Echaniz a los que se les acusa de haber formado a nuevos etarras.
Según la policía francesa, Karasatorre se encargaba del adiestramiento en bombas lapa y Alberdi del manejo de armas. Según Broglio, se habrían encontrado documentos probando su responsabilidad en esta tarea en los pisos de Toulouse y de Castres.
Algunos de estos nuevos terroristas recibieron una formación de 52 días antes de pasar a la clandestinidad, según el policía encargado de la investigación Jerome Broglio quién citó el relato de uno : "Ahora ya soy una obrera más en la construcción del País Vasco", dijo el policía en referencia a una carta encontrada.
En este cuarto día de juicio se presentó la prueba de unas gafas que se les ponían presuntamente a los aprendices para evitar que vieran donde se encontraba el lugar de la formación.
RECLUTAMIENTO.
La francesa Laurentxa Beyrie, también en el banquillo, de los acusados, se ocupaba, según Broglio de alquilar los apartamentos que habrían ocupado por unos meses los presuntos terroristas en varias localidades del suroeste francés "haciéndose pasar por estudiante". Broglio afirma que también se dedicaba a "reclutar a jóvenes militantes franceses para que hicieran de correo entre Francia y España".
Los otros acusados, Iñaki Lizundia Alvarez, exconcejal de Herri Batasuna, Gabriel Saez Totoricaguena y Nerea Garaizar San Martin habrían formado parte de la estructura de información de ETA llamada Edurne y luego Pianistas, dentro del aparato militar, según Broglio.
El policía antiterrorista Jean Pargade asegura que esta estructura de información se dedicaba a "recolectar datos sobre posibles objetivos de la banda". Broglio, por su parte, dijo que también guardaban "las cantadas", notas que hacen los etarras cuando son detenidos.
Durante la operación policial y la investiación en 2001 se encontraron listas de personalidades españolas entre las que había "integrantes del Opus Dei", afirmó Broglio.
Iñaki Lizundia Alvarez también está acusado de tres tentativas de homicidio voluntario contra militares, ya que en el momento de su detención abrió fuego contra tres gendarmes, que se presentan como parte civil en el proceso, y uno de los cuales se encontraba hoy en la sala 3 del Tribunal Especial de los Criminal donde se celebra el juicio.
Los acusados podrían ser condenados a penas de entre 15 y 20 años prisión y en el caso de Lizundia a la pena máxima de cadena perpetua. El veredicto se conocerá a principios de la próxima semana.