ETA rompe su 'alto el fuego permanente' con un coche bomba de gran potencia en la T-4 de Madrid

Actualizado: domingo, 31 diciembre 2006 1:05


MADRID, 31 Dic. (EUROPA PRESS) -

La banda terrorista ETA rompió ayer nueves meses y ocho días de 'alto el fuego permanente' con una furgoneta bomba en el aparcamiento de la T-4 del aeropuerto de Madrid-Barajas. En una comparecencia de carácter técnico, el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, hizo un relato de los hechos y confirmó que este atentado "rompe el alto el fuego permanente" que ETA abrió el 22 de marzo de este año. La explosión "muy potente" provocó una veintena de heridos leves y dejó "seriamente dañado" el módulo D del aparcamiento del aeropuerto, que durante unas horas se sumió en la confusión y el caos, así como dos desaparecidos. Rubalcaba aseguró que esperaba, aunque "no mucho", que el portavoz de Batasuna, Arnaldo Otegi, se pronuncie claramente sobre "si cree o no en la democracia" condenando el atentado.

El relato de los hechos que realizó el ministro coincidió con el alud de informaciones que llegaron a lo largo de la mañana por distintos canales. Según Rubalcaba, se produjeron hasta tres llamadas de aviso, la primera de ellas a las 7.55 horas, al servicio de atención en carretera (DYA) de San Sebastián. Una persona visiblemente nerviosa, según fuentes del DYA, alertó de la colocación de la furgoneta bomba, sus características, y de que "cualquier intento por desactivar la bomba" sería en vano.

Entre las 8.00 y las 8.05 horas el Parque de Bomberos de Madrid recibió una nueva llamada de aviso, pero no fue hasta la tercera llamada, sobre las 8.30 horas, cuando el comunicante se identificó "como un interlocutor de ETA" y por tanto "como miembro de ETA y hablando en nombre de ETA", remarcó el ministro. La Policía y la Guardia Civil acordonaron la zona y sobre las 9.00 horas se produjo la explosión. Según el vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, la deflagración se produjo "minutos antes de lo anunciado"; según el ministro del Interior, "más o menos sobre la hora anunciada".

La explosión de la furgoneta Traffic de color granate fue, en palabras de Rubalcaba, "muy potente" y dañó "seriamente" el módulo D del aparcamiento de la T-4 de Barajas. Según un bombero de AENA, provocó el derrumbe de parte del techo de hasta cinco plantas del parking. Aunque la zona había sido desalojada, la onda expansiva provocó hasta una veintena de heridos leves que se encontraban en los alrededores y que fueron atendidos por un hospital de campaña del SAMUR, entre ellos varios policías. La mayoría de los heridos presentaba heridas y cortes, así como dolores en el tímpano o incluso crisis de ansiedad.

Según confirmó el ministro, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad se volcaron en la búsqueda de una persona desaparecida, al parecer un hombre que había acudido con su pareja que iba a recoger a un amigo que llegaba de madrugada. "El chico se quedó en el coche para echar una cabezada y todavía no ha aparecido", informó Rubalcaba, que añadió que "se le está buscando entre los escombros, porque el aparcamiento está muy dañado". La novia del joven, de nacionalidad ecuatoriana, explicó a los medios que se llama Diego Armando Estacio, de 19 años, e hizo un llamamiento para que se pusiera en contacto con ella si aparecía.

Horas más tarde, familiares de una segunda persona confirmaban su desaparición en el lugar de los hechos. Se trata de Carlos Alonso Palate, también de nacionalidad ecuatoriana, y, como su compatriota, descansaba en su vehículo en el momento de la deflagración. Según un portavoz de Emergencias de Madrid, las condiciones en las que se encuentran los resto del aparcamiento de la nueva terminal, con gran cantidad de material que se puede desprender, hacer prever que las tareas de desescombro podrían prolongarse durante varios días.

200 KILOS DE EXPLOSIVOS

Los agentes de Policía Científica y Técnicos Especialistas en Desactivación de Explosivos (TEDAX) realizaron a media tarde un primer cálculo sobre la carga que contenía la furgoneta bomba que estalló en el aparcamiento del aeropuerto Madrid-Barajas y concluyeron que estaba compuesta por alrededor de 200 kilos de material explosivo, según informaron fuentes de la investigación.

El cálculo de los especialistas se basa en los destrozos causados por la bomba expansiva, ya que fue imposible recoger muestras del material con el que estaba compuesto la bomba debido a las dificultades que presenta el escenario del atentado. La recogida de pruebas en el escenario siguió un ritmo lento ante el peligro de que los policías que trabajaban en el aparcamiento pudieran sufrir accidentes por desprendimientos.

Sobre el vehículo utilizado por los terroristas, una Renault Traffic de color granate, la Policía emprendió una línea de investigación que apunta a que fue robada hace tres o cuatro días en alguna localidad del País Vasco, aunque el estado en el que se encuentra el aparcamiento de la T4 también impidió a los agentes acceder hasta el bastidor del vehículo, por lo que esa línea de investigación no está completamente avalada.

LA OPORTUNIDAD DE OTEGI

Por primera vez en la historia de la banda terrorista, la ruptura del 'alto el fuego permanente' que decretó el pasado marzo no llegó tras un comunicado previo anunciando el quiebre de la tregua por parte de la Dirección de ETA. Sin embargo, y como apuntó Rubalcaba durante su comparecencia en el Ministerio del Interior, "hacer análisis racionales de una banda terrorista conduce siempre a riesgos" porque "no estamos ante un fenómeno, un proceso o ante gente racional". Sin embargo, Rubalcaba prefirió dejar las consideraciones políticas para la comparecencia del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.

Se limitó a "tres breves consideraciones". La primera de ellas la condena "rotunda" de un atentado "que viene a interrumpir nueve meses sin actuaciones violentas y que rompe el alto el fuego permanente de ETA". Tras informar de sus contactos con los grupos parlamentarios y ponerse a disposición de sus portavoces, Rubalcaba hizo, en tercer lugar, una "brevísima consideración política: La violencia es incompatible con el diálogo. En cualquier democracia violencia y diálogo son incompatibles y esta es una regla que el Gobierno seguirá tajantemente".

El ministro del Interior prefirió no adelantar datos que puedan comprometer las investigaciones que "muy efectivamente" y "rápidamente" comenzaron las Fuerzas de Seguridad, pero dejó claro que "no había ningún indicio" de que un hecho así pudiera acontecer" y que en el Ministerio "existe la convicción" de que la autoría correspondía a ETA. En todo caso, no dejó de mandar un mensaje a Arnaldo Otegi y aunque dijo que "esperar, no espero mucho", destacó que el dirigente abertzale "tiene una buena ocasión para decir a los ciudadanos españoles si cree o no en la democracia".

"Ellos que quieren participar en política y que están hablando todo el día de entrar en política, tienen la oportunidad de explicar que entienden que las reglas de la política democrática son las que son y una de ellas, la más importante, es que con violencia no hay nada", sentenció.