BRUSELAS, 2 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Parlamento Europeo decidirá al inicio de su sesión plenaria de este lunes si modifica su agenda para incluir en ella un debate sobre la situación en Cataluña, tras los incidentes registrados durante la jornada del 1 de octubre en que se celebró el referéndum ilegal sobre la independencia.
Los Verdes y la Izquierda Unitaria ya intentaron sin éxito la semana pasada que el desafío independentista se incluyera en el orden del día, pero esta iniciativa chocó con la oposición del Partido Popular Europeo (PPE) y de los Socialistas y Demócratas (S&D).
Sin embargo, el eurodiputado de ICV Ernest Urtasun anunció al término de la jornada del 1-O que su grupo volverá a plantear la cuestión cuando comience el pleno en la tarde de este lunes.
"Esperamos que el Parlamento Europeo debata la situación esta semana y exprese un claro rechazo a la violencia y un claro apoyo a una solución negociada para el conflicto. El diálogo, no la represión, debe estar en la agenda", ha declarado este lunes el eurodiputado de Los Verdes y copresidente del partido europeo, Reinhard Bütikofer.
Además, los socialistas europeos han cambiado de opinión y "apoyarán la idea de tener un debate sobre Cataluña", han informado a Europa Press fuentes del grupo europeo.
El líder del S&D, el italiano Gianni Pittella, dijo el domingo que era "un día triste para España y para toda Europa" y consideró que aunque "no hay duda" de que el referéndum ha sido una consulta "ilegal e inválida", debe "escucharse" también a los catalanes que "tomaron las calles".
"La solución solo puede venir de una respuesta política, no una policial", zanjó el socialista italiano, tras considerar que "nunca" debieron haberse producido las "terribles imágenes de violencia" vistas en Barcelona.
Con todo, los socialistas plantearán un título alternativo: "Constitución y Estado de Derecho en España a la luz de los recientes acontecimientos en Cataluña", han aclarado fuentes de la delegación socialista española.
LA POSICIÓN DE LOS LIBERALES
Los liberales europeos (ALDE), por su parte, que el pasado jueves se abstuvieron en el voto que dejó fuera de la agenda el debate catalán, podrían reconsiderar su posición ahora, aunque lo decidirán en una reunión de grupo poco antes del comienzo del pleno.
Su jefe de filas, el exprimer ministro belga Guy Verhofstadt, condenó con firmeza tanto la celebración de un referéndum prohibido por el Tribunal Constitucional como el uso "desproporcionado" de la violencia para frenarlo.
"En la Unión Europea intentamos encontrar soluciones a través del diálogo político y con respeto al orden constitucional consagrado en los Tratados", declaró Verhofstadt.
El PPE, por su parte, no ha decidido aún cuál será su posición sobre el debate y lo valorará en una reunión de grupo previa al pleno, han explicado fuentes parlamentarias.
