El ex consejero canario Luis Soria (PP) dice que Perdomo no le comunicó su relación con implicados en el caso eólico

Actualizado: martes, 23 enero 2007 19:23

Los socialistas le acusan de intentar eludir responsabilidades

SANTA CRUZ DE TENERIFE, 23 Ene. (EP/IP) -

El ex consejero canario de Industria, Luis Soria, afirmó hoy ante la comisión parlamentaria que investiga las posibles irregularidades cometidas en el concurso de asignación de potencia eólica convocado por su departamento en 2004 que hizo "todo lo posible" para que el concurso trascurriera con la "máxima rectitud y máximas garantías". Así, Soria señaló que el director general de su consejería, Celso Permodo, no le comunicó su relación con implicados en este caso.

Soria aseveró al inicio de su primera intervención que, "hoy, conociendo el sumario y lo publicado en los medios, resulta evidente que el director general de Industria, Celso Perdomo, no me trasladó su relación con otros implicados en todo esto". Añadió que "entonces" no tuvo dudas sobre la "integridad y honestidad" de Perdomo porque de lo contrario, "le hubiera cesado de forma inmediata".

Tras escuchar las palabras de Soria, el diputado socialista Santiago Pérez apuntó que el ex consejero "puede tratar de quitarse del medio la responsabilidad que tenía en ese departamento pero, a tanta confianza depositada en su equipo de gobierno, igual responsabilidad". Pérez criticó, tal y como había admitido Soria antes, que el ex consejero se negara a iniciar una investigación interna en la consejería al conocerse los hechos denunciados. "Esa negativa, por la confianza que tenía en su equipo, es la clave de la que se deriva su responsabilidad", espetó a Soria.

Soria explicó que el nombramiento de Perdomo surgió tras examinar "unos cinco aspirantes con perfil técnico, del que Perdomo parecía ser el ideal". Los socialistas preguntaron si era casualidad que "el mejor candidato fuera también miembro de la cúpula del Partido Popular de Canarias (PP)", organización presidida por su hermano, José Manuel Soria. "Su filiación política no tuvo nada que ver con su elección, ya que en mi entorno de la consejería había unos 12 cargos de los que sólo tres eran afiliados del PP".

PERDOMO SE REUNÍA CON EMPRESARIOS

El ex consejero puntualizó que "parte de las responsabilidades de Perdomo incluían reunirse con los empresarios que solicitaban información del concurso eólico". "Otra cosa es si acordó algo con ellos", matizó. Soria aseguró que supo de los correos electrónicos enviados supuestamente desde el ordenador de Perdomo con una relación de contactos políticos y suelos disponibles aptos para el concurso eólico "después de que abandoné el cargo, en mayo de 2005". "De haber permanecido más tiempo al frente de la consejería, yo mismo habría ordenado la apertura de una investigación sobre el asunto", afirmó.

Soria acusó más tarde al Partido Socialista Canario (PSC) de intentar "lanzar una gran cortina de humo para desviar el centro neurálgico de todo esto porque no les interesa que la investigación judicial y la comisión parlamentaria llegue a conclusiones que deriven de lo que realmente ha ocurrido, sino que buscan otra cosa, y siguen machaconamente intentándolo". "Compraron unos boletos en una tómbola creyendo que les iban a tocar el oso de peluche pero les ha tocado un pirulí y no están contentos".

El ex consejero criticó que cuando el PSC solicitó a la Cámara una comparecencia en abril de 2005 para que informara sobre los hechos denunciados "no aportara otras pruebas" porque, "quizás, nos hubiésemos ahorrado muchísimo tiempo y esfuerzo en el esclarecimiento de todo esto ya que, igual, ni hubiera existido este asunto pero los socialistas lanzaron sospechas sobre el director general y dos empresarios". "Quizás la trama eólica se hubiera abortado si el PSC hubiera puesto en conocimiento de la Cámara alguna información que quizás no aportó", insinuó.

NO QUISO BENEFICIAR A EMPRESARIOS

La diputada socialista Gloria Gutiérrez preguntó a Soria si había intentado beneficiar a los empresarios Javier y José Ignacio Esquível en el concurso eólico y si le habían manifestado que tuvieran interés en participar en la empresa pública Megaturbinas de Arinaga. Soria negó haber tratado de beneficiar a "nadie" y aseguró que los hermanos empresarios "nunca mostraron interés" en el asunto.

Acerca del viaje en el que Soria y esos empresarios se encontraron en Alemania días antes de la publicación de las bases del concurso eólico para visitar Enercon, el ex consejero explicó que se trató de "dos viajes distintos" que "coincidieron" en Alemania. Enercon era en 2004 el único fabricante de aerogeneradores que producía el modelo de molino que mejor puntuaba en el concurso.

Soria afirmó que el viaje del Gobierno de Canarias estuvo organizado por su gabinete y recordó, ante la insistencia del PSC en este asunto, que el director de Energía y Medioambiente de Servicios y Proyectos Avanzados (SPA), Juan Carlos Sirviente, empresa participada por Javier Esquível y en la que José Ignacio es vicepresidente, "ya ha explicado ante esta comisión que coordinó el viaje de esos empresarios con el de la consejería a instancias de Enercon dada la cercanía en fechas".

Admitió "conocer de muchos años" a los hermanos Esquível y aseguró que se reunió con ellos "sólo en dos oportunidades", aparte de una cena que tuvieron en el viaje de Alemania. "Desde entonces no he vuelto a ver a los Esquível ni a Sirviente". Soria criticó el interés del PSC por conocer la relación con los Esquível "cuando me reuní con más de 40 representantes empresariales, de ayuntamientos, cabildos y hasta de órdenes religiosas que demandaban información sobre el concurso eólico".

En todo caso, aclaró que no coincidió con los Esquivel en la fábrica de Enercon ni en la visita a la turbina dentro del aerogenerador, "sino en la base del molino y en una cena posterior en la no se discutió de nada sobre el concurso eólico".

Esos encuentros que tuvo con todos los demandantes de información sobre el concurso eólicos "eran reuniones de marco político" en las que "jamás" ofreció información privilegiada a nadie. Soria recordó, ante las suspicacias de los socialistas, que "absolutamente nadie protestó entonces de que las bases del concurso eólico favorecieran una tecnología determinada". .